Por EUGENIO FERNÁNDEZ /
CANARIAS-SEMANAL.ORG.- Manuela Carmena, la alcaldesa "progresista"
de Madrid, daba un nuevo impulso este miércoles a la campaña mediática
orquestada por la derecha internacional contra Venezuela, reuniéndose con
Mitzy Capriles, mujer de Antonio Ledezma,
alcalde de Caracas encarcelado por su vinculación con los planes golpistas
desarrollados contra el Gobierno de ese país.
Capriles, que actualmente desarrolla
una gira destinada a presentar a su esposo y otros opositores como
“pacíficos defensores de la democracia represaliados por la dictadura
venezolana", se reunió también con la presidenta de la Comunidad de Madrid
Cristina Cifuentes.
La primera edil de la capital del Reino aupada a ese
cargo por Podemos, sin embargo, coincidió con la política
ultraconservadora en su apoyo al proyecto de desestabilización patrocinado por
los Estados Unidos contra el Ejecutivo de Nicolás
Maduro.
A través de la cuenta en Twitter de su
esposo, Capriles comentó que Carmena se mostró
"solidaria con las víctimas de detenciones
arbitrarias".
Paralelamente a este encuentro Lilian
Tintori se reunía con el expresidente del Gobierno José María
Aznar y con la ya mencionada Cristina Cifuentes. Tintori
es esposa de Leopoldo López, otro “opositor”
encarcelado por su participación en la organización de las llamadas
"guarimbas", violentas acciones callejeras que se han saldado en
Venezuela con la muerte de más de 50 personas y centenares de
heridos.
JOSÉ MARÍA AZNAR CON LILIAN TINTORI, ESPOSA DE LEOPOLDO LÓPEZ
Tintori, que también se encuentra en
Madrid para desarrollar la campaña contra el Gobierno bolivariano de Venezuela,
con vistas a las próximas elecciones legislativas del 6 de diciembre, exigió la
libertad de lo que calificó como “presos políticos".
IGLESIAS ELUDE A CAPRILES,
PERO AVALA LA VERSIÓN DE LOS GOLPISTAS
Por su parte, la esposa del alcalde de Caracas, Mitzy Capriles,
expresó también su "profundo desagrado" después de que
Pablo Iglesias manifestara que no podría recibirla, tal y como
ésta había solicitado, por "problemas de agenda".
Según expresó Capriles, esta es la
segunda ocasión en la que Iglesias alega problemas de agenda para excusarse ante
la petición de las esposas de los “disidentes”.
Una solución de compromiso con la que Pablo Iglesias parece
querer mantenerse en un discreto segundo plano, sin dejarse fotografiar con las
representantes de la oposición golpista al proyecto bolivariano que él mismo
apoyaba, abiertamente, antes de convertirse en aspirante a la presidencia del
Gobierno de España.
Los cálculos electoralistas del líder de
Podemos, sin embargo, sí le llevaban el pasado 23 de febrero a
rechazar la detención de Ledezma, en una entrevista concedida a Pedro Piqueras
para Informativos Telecinco
"A mí no me gusta que se detenga a un alcalde; no
hay ni un matiz en mis palabras"- aseguraba, avalando así la versión
mediática sobre el supuesta "arbitrariedad" de esta medida adoptada por
el gobierno venezolano.
Con estas palabras, Iglesias
confirmaba la que iba a convertirse en la postura oficial de su partido
al respecto de este conflicto político, apenas unas horas después de que la
adelantase la eurodiputada de Podemos Tania Sánchez.
"No nos gusta que se detengan alcaldes, que se
detengan cargos políticos, en ningún país, en ningún lugar del mundo" -
apuntaba Sánchez.
El pasado mes de mayo, durante una visita realizada a
Canarias en plena campaña electoral para los comicios autonómicos y locales,
Iñigo Errejón reafirmaba esta asunción definitiva del discurso construido para
subvertir el proceso bolivariano.
"Podemos está en contra de la vulneración de los
derechos humanos y de los ataques a la libertad de prensa sea donde sea, también
en Venezuela" – manifestaba entonces el lugarteniente de Pablo
Iglesias.
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