Uno
de los temas donde con mayor fuerza se refleja el consenso de
periodistas, ejecutivos, y especialistas es el de la potencialidad de la
propiedad social sobre los medios de prensa, en tanto premisa básica
para hacer un periodismo no sujeto a intereses mercantiles o
particulares, y que pueda realizar una labor de auténtico servicio
social (…)
La
propiedad social no debe ser identificada -como lo hace el discurso
adverso a Cuba- con una estatalización de la prensa, sino ,
principalmente, como el derecho de toda la sociedad organizada a tener
medios, los cuales debieran ser una fuerza de signo político vinculada a
la movilización de la opinión pública, a la expresión de intereses y
puntos de vista de distintos
sectores sociales, y desde otro ángulo, constituir un factor
equifinalizado -en el caso nuestro- con los objetivos estatales, pero
capaz de cumplir ese papel mediante una función de socialización,
orientación, educación, contrapartida y crítica a la gestión
administrativa y social (…)
El
ideal es el sistema que tenemos. No es malo, si los elementos que lo
componen cumplen cada uno de verdad su papel. El Partido orientando la
política, la estrategia. El director organizando y dirigiendo lo que le
toca. Y el periodista trabajando sin miedo, investigando, y sin que le
corten las alas. Es una buena política, pero ella como toda la política,
pasa por los seres humanos. No es el sistema en sí el que tiene
problemas (…)
En
cualquier país del mundo los medios son funcionales como conjunto al
sistema político prevaleciente, actúan dentro de sus reglas del juego,
lo producen y reproducen, y esa funcionalidad se torna uso instrumental
apenas asoma una crisis, una guerra, unas elecciones, o un estado de
tensión cualquiera que pone en riesgo intereses vitales de poder.
El
problema es que en Cuba ese estado es permanente. Hemos construido una
relativa normalidad interna por encima y a despecho de esta situación,
vivimos dentro de ella, y por eso a veces dejamos de percibir que
estamos sentados sobre un volcán y que sobre nosotros pesa la sentencia a
muerte de la superpotencia (…)
La
transformación de la prensa cubana es posible. Como todo cambio social,
que pasa por la subjetividad de seres humanos, su posibilidad es
potencial y no constituye una regularidad férrea. Puede abrirse paso o
no. Su realización estará sujeta a varios factores: la voluntad desde el
poder, unida a la comprensión de la necesidad y la conveniencia de
hacerla; disponer de las fuerzas capaces, prepararlas y conducirlas,
lograr el apoyo interno de la sociedad, contar con las premisas
materiales, hacerla viable institucional y legalmente, y hallar un
contexto externo mínimamente favorable, entre otros (…)
Lo
menos importante de los cambios en la prensa -es dramático decirlo- es
posiblemente la propia prensa. Lo importante es lo que ella significa
como referente político y moral de la Revolución y como fuerza
aglutinadora de consenso a nivel nacional y territorial.
No
desconocemos que la prensa en un país como Cuba no puede ir más lejos
de lo que la situación económica, política y militar le permite ; pero
tampoco se podría ignorar que la vida real de nuestro país ha dado un
vuelco de escenario: Hay un pluralismo de intereses creciente, hay
expectativas no satisfechas, hay una parte de las generaciones jóvenes
que se tornan por momentos dolorosamente impermeables al discurso
tradicional, hay canales alternativos de información cada vez más
socorridos, hay actitudes de cansancio y pérdida de esperanzas, las
zonas de pobreza se han expandido con casi tanta fuerza como las
desigualdades sociales; la corrupción , entretanto , se ha instalado a
lo largo del cuerpo social; y hay, por último, un sistema unipartidista
que estratégicamente necesita legitimarse en el diálogo generacional, en
la voluntad renovadora y en la apertura al reconocimiento y debate
sinceros de las nuevas realidades (…)
Sería una arrogancia tratar de dictar pautas sobre cómo
proceder para lograr un reajuste efectivo de la prensa cubana, que
transforme lo que debe ser transformado y que, al mismo tiempo, preserve
su carácter clasista y revolucionario, la propiedad social de los
medios y la dirección del Partido, como sus tres pilares irrenunciables.
Probablemente
nadie podría disponer a priori de una fórmula para ello, puesto que el
escenario para realizar esos cambios puede ser variable, y dependerá en
gran medida de la recuperación económica nacional y de la evolución de
la coyuntura externa del país, dominada por el conflicto con los Estados
Unidos y sus políticas anticubanas (…)
La
economía política de la prensa es un tema que requiere también
reflexión. En tanto servicio público de interés social, que no tiene en
ocasiones vías propias para sostenerse con sus ingresos, como ocurre
sobre todo con el caso de la radio, la televisión, los sitios webs de
estos medios y el cine, y en una parte de la prensa impresa y las
agencias de noticias, está claro que en estas situaciones ella debe
nutrirse del presupuesto del Estado.
Hay
otros casos, como el de los diarios con tiradas masivas, y el de otras
publicaciones, en los que la prensa puede autofinanciarse y cubrir sus
propios gastos.
Hay
una realidad. La capacidad económica de la prensa cubana no depende hoy
de la calidad y eficiencia de su gestión, sino de otros factores. Sería
injusto establecer diferencias sobre la base del mercado y los
ingresos, aunque el gobierno pudiera determinar tratamientos casuísticos
para órganos de prensa que resulten rentables, y estímulos para
aquellos que sin serlo alcancen resultados profesionales sobresalientes.
Lo
importante, en cualquier caso, es que la prensa logre sacudirse de la
dependencia que, en el orden material, usualmente ha atado a las
entidades administrativas, que son a la vez las fuentes hacia las cuales
debe ejercer una función de contrapartida, y sea capaz de sostener por
sí misma su funcionamiento y las decisiones que correspondan a su
política editorial. En ocasiones pasadas ha sido inevitable tal
conflicto de intereses. Hacia el futuro, la prensa debería estar libre
de compromisos que pudieran influir en su capacidad de gestión y en el
ejercicio de la cítrica hacia la actividad productiva y de servicios.
Otra
vertiente del problema es la configuración de políticas editoriales en
todos lo medios que potencien al máximo las posibilidades para lograr
verdadera interacción con los públicos, algo que se convierte en una
caricatura, en un sucedáneo mercantilizado, bajo el modelo capitalista
de la llamada prensa liberal, y que solo el socialismo podría convertir
en verdadera comunicación.
Por
otro lado, no solo las organizaciones que forman la sociedad política,
como pueden ser destacadamente la escuela y las organizaciones de masas y
sociales, sino también las que integran la denominada sociedad civil,
todas las entidades que interaccionan con los medios y que intervienen
en la formación y orientación de la conciencia ciudadana, debieran
contribuir a que los emisores sean cada vez mas responsables, y a que
los receptores sean cada vez más activos y críticos (…)
Esa
sería la prensa capaz de seguir combatiendo con mayor eficacia a un
enemigo que posee capacidad y experiencia para ajustar sus ataques a
cualquier perfil que adoptemos (…)
Cuba
tiene posibilidades reales, cimentadas en su historia y su cultura,
para cumplir ese objetivo. Una vez más, se confirmará la sabia
advertencia de Simón Rodríguez, el maestro de Bolívar: o inventamos o
fracasamos.
(*) Julio García Luis (1942-2012) Periodista de Granma, Trabajadores,
y otros medios de prensa. Fue decano de la Facultad de Comunicación de
la Universidad de La Habana y presidente de la Unión de Periodistas de
Cuba (UPEC). Recibió el Premio Nacional de Periodismo José Martí Por la
Obra de la Vida. Su libro Revolución, socialismo, periodismo. La prensa y los periodistas cubanos ante el siglo XXI, fue publicado póstumamente en 2013, a él pertenecen estos fragmentos.
La VII
Reunión de Coordinación Continental de ALBA Movimientos se llevará a
cabo los próximos 2 y 3 de marzo en la capital venezolana.
ALBA Movimientos,
espacio que aglutina a organizaciones populares de 25 países de las
Américas, anunció este domingo que celebrará una reunión en Caracas,
capital de Venezuela, a finales de esta semana.
La articulación regional indicó en su cuenta oficial de la red social
de Twitter que la VII Reunión de Coordinación Continental de ALBA
Movimientos se llevará a cabo los próximos 2 y 3 de marzo en la capital
venezolana.
Mencionó que la
cita, que se efectuará bajo la consigna: A 10 años de su siembra, Chávez
vive en el ALBA, congregará a delegados de más de 20 países.
ALBA Movimientos surgió de intensas luchas contra el Área de Libre
Comercio de las Américas (ALCA), que impulsaba Estados Unidos en la
década de 1990 hasta 2005, cuando fue derrotado por la lucha popular.
La reunión del 2 al
3 de marzo tendrá lugar en vísperas del décimo aniversario del
fallecimiento del expresidente venezolano Hugo Chávez (5 de marzo de
2013), quien fue el impulsor de la Alianza Bolivariana para los Pueblos
de Nuestra América - Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP).
Denuncian
que Washington y el bloque militar mantienen más de 800 bases militares
en todo el mundo, de ellas 76 en América Latina.
La vicepresidenta
de la Sociedad Cubana de Derecho Internacional, Doris Quintana, denunció
este jueves que Estados Unidos y la Organización del Tratado del
Atlántico Norte (OTAN) mantienen más de 800 bases militares en todo el
mundo, de ellas 76 en América Latina.
La jurista dictó una conferencia acerca del carácter ilegal de la
base militar de EE.UU. en la bahía de Guantánamo, al este de Cuba,
exposición que coincidió con la convocatoria del Consejo Mundial de la
Paz para que a nivel internacional se rechacen estos enclaves y los 120
años de que Washington instaló la base en la referida localidad cubana,
hecho que ocurrió el 23 de febrero de 1903, luego de que la Casa Blanca
impusiera un apéndice a la Constitución que tenía entonces la nación
caribeña.
La experta aseveró
que la base estadounidense en Cuba “nació de un tratado espurio, sucio,
ilícito”, pues el apéndice constitucional conocido como Enmienda Platt
violó abiertamente los principios del derecho internacional.
Precisó que ninguna Constitución del mundo tiene como apéndice una
enmienda legislada por un Congreso de otra nación. Además, dijo que
EE.UU. coaccionó a Cuba para firmar el tratado que permitió establecer
la base militar y no definió una fecha de término del acuerdo.
La devolución de
los 117 kilómetros cuadrados que ocupa la base estadounidense en
Guantánamo es eje central de la lucha política y diplomática de Cuba,
además del levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero
de EE.UU.
Expertos han
señalado que la base estadounidense en Guantánamo ya no es útil desde el
punto de vista militar, pero Washington la mantiene en actitud hostil y
prepotente hacia la Revolución Cubana.
También contra
otros pueblos, pues la historia recoge que desde allí partieron
invasiones contra México, Haití, la República Dominicana, Nicaragua y
Guatemala.
En 2002 la Casa
Blanca abrió allí un centro de detención al que llevó a cerca de 800
prisioneros de la llamada Guerra contra el Terrorismo. Esta
penitenciaría ganó celebridad por los abusos y por mantener tras las
rejas, durante años, a reos que no fueron formalmente acusados.
La presidenta del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP)
en la provincia de Guantánamo, Ana Teresa Nápoles Disotuar, informó
sobre la realización de un panel sobre los impactos negativos de la base
militar estadounidense en los habitantes del municipio de Caimanera,
aledaño al enclave. Este panel fue organizado el Centro Universitario
Municipal y el ICAP.
El 23 de febrero se
declaró Día de acción contra las bases militares en el extranjero
durante la Conferencia Mundial por la Paz, que sesionó en Dublín,
Irlanda, en noviembre de 2018.
En
los tiempos que corren, se ha hecho usual hablar de la expansión de la
OTAN “hacia el este de Europa”, lo cual siendo efectivo, es un concepto
reduccionista. Lo cierto es que desde el fin del mundo bipolar, Estados
Unidos, sintiéndose dueño del mundo, ha usado a la OTAN para expandirse
por todo el planeta. Pruebas de ello son la firma del Tratado AUKUS
(Australia, Reino Unidos y Estados Unidos), la creación del Diálogo de
Seguridad Cuadrilateral (QUAD) formado por Australia, India, Japón y
Estados Unidos y la Alianza de inteligencia de los Cinco Ojos (Estados
Unidos, Reino Unidos, Canadá, Nueva Zelanda y Australia) como
instrumentos de expansión militar de la OTAN en Asia y Oceanía.
Otro
tanto ocurre en América Latina y el Caribe, en la que Estados Unidos
está iniciando un agresivo plan de expansión a lo largo de todas las
latitudes y longitudes de la región. En tres entregas, queremos aportar
algunos datos que permiten confirmar la anterior aseveración
A
finales del año pasado Estados Unidos tenía instaladas 12 bases
militares en Panamá, 12 en Puerto Rico, 9 en Colombia, 8 en Perú, 3 en
Honduras, 2 en Paraguay, así mismo hay instalaciones de este tipo en
Aruba, Costa Rica, El Salvador, Cuba (Guantánamo), y Perú entre otros
países, al mismo tiempo en que orienta su búsqueda para el cubrimiento
total de la superficie terrestre y marítima de la región.
En
las aguas territoriales argentinas y en las islas Malvinas, que fueron
usurpadas por el Reino Unido, hay presencia de la OTAN integrada en un
sistema formado por bases en las islas de Ascensión, Santa Elena y
Tristán da Acuña que “resguarda” todo el Atlántico desde el norte hasta
la zona antártica.
Según
un informe del Departamento de Defensa de Estados Unidos citado por el
portal venezolano Misión Verdad desde mayo del año 2022 Reino Unido está
conformando un “triángulo estratégico de control” del extremo sur de
Sudamérica. Mientras que al sur de Malvinas, operan submarinos
nucleares. Además que “Francia y Estados Unidos organizan regularmente
maniobras militares conjuntas en la región”.
Durante
los últimos años, y sobre todo después de la llegada de la generala
Laura Richardson a la jefatura del Comando Sur de las fuerzas armadas de
Estados Unidos en octubre de 2021 los niveles de agresividad
injerencista de Washington en la región se han incrementado
ostensiblemente. Esto coincidió con el arribo al poder de Joe Biden
quien ha implementado una activa política de sustitución del tradicional
(y natural) protagonismo del Departamento de Estado en la actividad
diplomática que comenzó a ser ocupada por el Pentágono, el Consejo de
Seguridad Nacional y hasta por la CIA. Cada vez es mayor el número de
funcionarios provenientes de estas instancias que ocupan puestos de
embajador en América Latina y el Caribe.
La
estrategia de Estados Unidos está encaminada a fortalecer su presencia
en la región. En perspectiva, han cobrado particular importancia el
Atlántico Sur dada su cercanía a la Antártida que está regulada por un
tratado que fenece en 1941, el Amazonas principal reserva de oxígeno y
biodiversidad del planeta y la triple frontera donde se encuentra el
acuífero guaraní, mayor reservorio de agua del mundo.
Esto
es lo que da sentido a los intentos de Estados Unidos de reinstalar la
guerra fría en la región, esta vez en contra de China y Rusia. Esta
lógica explica la decisión de instar a seis países latinoamericanos a
donar su equipamiento militar ruso a Ucrania, excluyendo -por supuesto-
de esta solicitud a Cuba, Nicaragua y Venezuela. Richardson advirtió que
después de China, Rusia es el adversario número dos de Estados Unidos
en la región, recalcando el gran valor estratégico de la misma para su
país.
La
generala estadounidense ha denominado a China como “actor estatal
maligno” después que 21 de los 31 países de la región se han adherido a
la iniciativa china de la Franja y la Ruta, al mismo tiempo que se ha
incrementado la inversión de Beijing en infraestructuras críticas como
puertos de aguas profundas, la investigación espacial o las
telecomunicaciones, con las redes 5G y la empresa Huawei.
Richardson
ha resaltado el papel “protector“ que va a ejercer Estados Unidos sobre
la región porque ser buenos vecinos pasa por “cuidar el uno al otro” lo
cual “obliga” a Washington a hacerse cargo de luchar contra las redes
de delincuencia organizada que se dedican a la trata de personas, el
contrabando de droga, la tala no reglamentada y la minería ilegal y
especialmente “porque es una región rica en recursos y tierras raras,
con el llamado Triángulo del Litio que posee el 60% de las reservas
mundiales (en Argentina, Bolivia y Chile) un metal muy necesario para la
tecnología”.
De
la misma manera, Richardson ha dicho que a Estados Unidos le interesa
el petróleo (dadas las grandes reservas encontradas en Guyana y las
mayores del mundo existentes en Venezuela) así como el cobre y el oro de
la región, Igualmente es preocupación de Estados Unidos que el oxígeno y
el 31% de agua dulce de la Tierra se encuentra en el Amazonas. Por todo
esto –según ella- se debe mantener alejada a China que se ha convertido
en principal socio comercial de varios países de la región.
Esta
lógica se inserta en la Estrategia de “disuasión integrada” de Estados
Unidos, una modalidad renovada de la Doctrina de Seguridad Nacional que
se propone agrupar bajo conducción del Pentágono “todas las capacidades
tanto civiles como militares de gobiernos, empresas, sociedad civil y
academia de Estados Unidos y de todos sus aliados”.
En
la XV Conferencia de ministros de defensa de las Américas realizada en
Brasil en julio de 2022, el secretario de Defensa, Lloyd Austin presentó
esta estrategia a sus pares de la región. Dos meses después, en
septiembre, Richardson insistió con ella ante 14 jefes militares en la
Conferencia de Defensa de América del Sur.
El
interés de Estados Unidos tiene una perspectiva regional que se
sustenta en la necesidad de su control desde que hace 200 años cuando
fue enunciada la Doctrina Monroe. Pero en la perspectiva global, las
fuerzas armadas latinoamericanas constituyen un potencial combativo que
no puede ser desestimado. En 2018, Brasil contaba con 334 mil militares
activos, Colombia con 200 mil y Argentina con 51 mil. La OTAN cuenta con
3,5 millones de activos entre personal militar y civil. Según el centro de estudios CELAG,
tan solo Brasil y Colombia aportarían más activos a la OTAN que los
miembros europeos anexados en la década de 1990. En este sentido vale
hacer la comparación, considerando que por ejemplo Argentina tiene
activos similares a los de Bulgaria (24 mil 800) y República Checa (25
mil) juntos.
Para
entender mejor toda esta situación y conocer la intensa actividad
imperial para controlar el espacio latinoamericano y caribeño, vale
hacer una revisión de la forma como se ha ido materializando la
intervención de Estados Unidos y la OTAN en algunos países de la región:
Paraguay
El
Plan Maestro para la Navegabilidad del río Paraguay es una iniciativa
del gobierno de ese país para “maximizar la utilización de esa vía
navegable”, pero fue el embajador de Estados Unidos Marc Ostfield quien
hizo el anuncio. La obra está siendo apoyada por capitales de Estados
Unidos y será llevada adelante gracias a los servicios del Cuerpo de
Ingenieros del Ejército norteamericano, lo cual generó gran preocupación
en Argentina que considera que tal decisión va a significar un control
del territorio por parte de fuerzas extranjeras. De más está decir la
relevancia de la zona que forma parte de la Cuenca del Plata, la quinta
reserva de agua dulce más importante del mundo en extensión
Así
mismo, Washington no ceja en sus añejas intenciones de instalar una
base militar en la Triple Frontera (Argentina-Paraguay-Brasil), con la
excusa del combate al terrorismo internacional y al narcotráfico. En ese
marco, los intentos de militarizar la región y cambiar las “reglas de
juego” para que Estados Unidos pueda establecer territorios bajo su
control permanente son considerados en Argentina como sumamente
peligrosos. Así mismo, algunos líderes políticos locales han expresado
preocupación de que su región se vea sumida en una lógica de
confrontación entre Estados Unidos y China.
Aunque
el gobierno paraguayo ha dicho que el proyecto comprende «una
cooperación con especialistas de Estados Unidos» que incluirá el estudio
de los ríos, pero que no contempla una cooperación de carácter militar,
la total subordinación de Asunción a Estados Unidos hace dudar de esa
aseveración. En términos geopolíticos también se considera el hecho de
que Paraguay es el único país de América del Sur que no tiene relaciones
con China.
Argentina
Desde
la perspectiva argentina la decisión de Asunción de atraer a las
fuerzas armadas de Estados Unidos para avanzar en la navegabilidad del
río Paraguay se relaciona hoy con el creciente comercio de alimentos, lo
cual, en el marco de la guerra en Ucrania, se volvió estratégico.
El
fin de la hidrovía es permitir la navegación de naves de gran calado
con grandes volúmenes de carga los 365 días del año, rectificando el
trayecto y eliminando islas y otros obstáculos. La presencia de
especialistas del Ejército de Estados Unidos le da al proyecto un
carácter muy distinto a lo que originalmente se presentó como una obra
civil.
Por
otra parte, Estados Unidos ha mostrado preocupación porque el Estado
argentino se propone realizar una nueva licitación para el dragado del
río Paraná, (que recibe aguas del Paraguay) y algunas de las empresas
que intentarán ganarla, son de origen chino.
Para
Estados Unidos la Triple Frontera entre Argentina, Brasil y Paraguay es
de primordial importancia, El Comando Sur manifestó haber identificado
fuentes de financiación de “organizaciones terroristas” basadas en Asia
Occidental, mencionando al Hezbolá libanés y al Hamás palestino. Para
contrarrestar esta supuesta amenaza se creó un mecanismo multilateral
denominado 3+1 con los tres países sudamericanos y Estados Unidos.
Washington
también ha manifestado sumo interés en la Patagonia argentina. En ese
marco el pasado 8 de agosto el embajador de Estados Unidos en el país
asistió en la ciudad de Neuquén (ubicada a unos 1140 Km. al suroeste de
Buenos Aires) a una reunión con representantes de las corporaciones
petroleras más poderosas del mundo.
Cuatro años antes, en 2018 se anunció la construcción de instalaciones diversas, en un predio fiscal bajo dirección y financiamiento del Comando Sur de Estados Unidos. Aunque su embajada en Argentina se apresuró a informar que las
obras eran parte de un proyecto de “ayuda humanitaria” cuyo objetivo
era mejorar la capacidad de respuesta de Neuquén frente a desastres
naturales, la sociedad civil neuquina ha rechazado tal idea, toda vez
que la misma se ha caracterizado por el secreto, la falta de información
y la ausencia de comunicación en torno a saber qué ha obtenido
Argentina a cambio de la cesión de dicho territorio en una zona que es
considerada de alto valor estratégico.
El
proyecto caracterizado de “base militar camuflada” según un reporte del
periodista Ariel Noyola Rodríguez publicado en el portal RT forma parte
de una estrategia de alcance continental que se ha caracterizado como
una novedosa forma de intervención militar en la región: el programa de ‘Asistencia Humanitaria y Respuestas a Desastres Naturales’, auspiciado por el Comando Sur de Estados Unidos,
Por
otra parte, no se puede obviar en este análisis que parte del
territorio argentino se encuentra ocupado por la fuerza la OTAN. En
Malvinas se encuentras dislocados entre 1500 y 2000 efectivos militares
británicos, algunos de forma permanente, así como aviones caza
bombarderos de última generación
La
narrativa sobre el giro del gobierno venezolano hacia una política
económica neoliberal tiene ya un tiempo corriendo y cuenta con la
promoción de medios de comunicación de gran alcance. Presentada como un
eslogan rimbombante, como un enunciado general y extravagante al mismo
tiempo que borroso, este relato se basa en fragmentos inconexos de la
realidad que desembocan en un mosaico incongruente e ilegible.
Para quienes propalan
esta tesis, el supuesto neoliberalismo del presidente Nicolás Maduro es
tantas cosas a la vez que cuesta observar dónde está realmente el centro
de gravedad que certifica su supuesta conversión ideológica.
Acorde a la BBC, el turbocapitalismo de Las Mercedes, zona de clase elevada caraqueña, con sus tiendas de lujo, restaurantes de alto standing y casinos, confirmaría ese viraje. Para el medio Al Navío, la cuestión está en el levantamiento de los controles de precios y de cambio.
Según El País,
la oferta de trabajo en plataformas tipo Yummy o la circulación de
dólares en la economía y su establecimiento como medio de pago masivo
reflejan el salto hacia la liberalización. Para Alberto Barrera Tyszka, en un artículo publicado en The New York Times hace algunos años, el neoliberalismo sería la pata económica de la «dictadura» de Maduro.
Este mínimo registro de
cómo se ha presentado el tema viene a cuento para visualizar uno de los
aspectos problemáticos centrales de esta narrativa: su carácter
omniabarcante, difuso y a veces abstracto. Caracterizar de neoliberales
cuestiones regulares de la actividad económica como el auge comercial o
de movimiento de dinero en las calles implica un reduccionismo ramplón
que se apoya en el uso abusivo del recurso de la generalización con
fines de manipulación.
La ambigüedad conceptual, premeditada hasta cierto punto, también tiene un rol a la hora de masificar el relato. La palabra neoliberalismo
en relación con Maduro ha servido para nombrar distintos fenómenos, en
su mayoría independientes de su cálculo de decisión, a tal punto de que
cualquier aspecto de su estrategia económica entra, aparentemente sin
contradicciones, en dicho registro.
Así, tal categoría se
asume con un sentido conclusivo sin que medie una definición inicial que
establezca los límites del propio concepto y su relación con un
contexto político y económico venezolano marcado por elementos bien
particulares. Solo a partir de ahí, empezando por el principio, es
posible arrojar claridad sobre la estrategia del presidente venezolano y
cómo su aplicación difiere del tan cacareado neoliberalismo.
Por lo general, según la
experiencia histórica que dejaron las políticas implementadas por la
dupla Reagan-Thatcher, a principios de la década de 1980, así como
también unos años antes por la dictadura de Augusto Pinochet en Chile,
cuando se habla de neoliberalismo se hace referencia a una política de
ajuste estructural signada por privatizaciones en sectores estratégicos,
financiarización del tejido económico, desregulación de servicios
públicos esenciales y un aumento en el poder de decisión de las empresas
concentradas en detrimento de la autoridad del Estado.
Neoliberalismo es, también, una corriente de pensamiento
desarrollada en la Escuela de Chicago, cuyas figuras visibles fueron
los economistas Milton Friedman y George Stigler, y que después de 1989
se hizo hegemónica a escala mundial tras el colapso de la Unión
Soviética, lo que estableció el marco ideológico dominante de un nuevo
impulso globalizador con centro en Estados Unidos, sus transnacionales y
Wall Street.
Para que una política
económica sea neoliberal en el sentido estricto de la palabra, deben
cumplirse ciertas condiciones. Una de ellas es la desregulación de todo
cuanto sea posible en términos de actividad económica. Esto quiere
decir, en pocas palabras, suprimir todo factor de control, supervisión o
gestión del Estado sobre sectores estratégicos, financieros y servicios
esenciales.
Como ejemplo reciente y a la mano de una terapia de shock neoliberal tenemos el gobierno de Mauricio Macri en Argentina (2015-2019). En lo político, el «laboratorio neoliberal» que
encabezó implicó el ascenso de banqueros y tecnócratas en altas
posiciones de poder, lo que configuró un gobierno corporativo repleto de
CEOs.
Por el lado económico y
financiero, su administración ejecutó un endeudamiento insólito con el
Fondo Monetario Internacional (FMI) y acreedores privados, cuyos compromisos externos
del país llegaron a más de 250 mil millones de dólares. La biclicleta
especulativa de la deuda, junto con la desregulación de los servicios
con el denominado «tarifazo«,
fueron los principales movimientos del manual neoliberal de pérdida de
soberanía y mutilación del Estado aplicado por el gobierno de Macri.
En vista de estas
referencias teóricas y políticas, si Maduro fuese un neoliberal a carta
cabal no solo Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA) sino las empresas
básicas, el Metro de Caracas, las empresas de electricidad,
telecomunicaciones y de suministro de agua, por solo mencionar algunos
casos, estarían ya en manos del sector privado.
Los bancos públicos, por
ejemplo, representarían una pequeña fracción del sector bancario
nacional, dominado en casi su totalidad por banqueros privados. A nivel
regulatorio, no existirían restricciones como el encaje legal o una
orientación pública de las carteras de crédito.
De la misma forma, las
políticas de recaudación fiscal serían llevadas a su mínima expresión.
Este patrón se reproduciría en cada ámbito de la economía.
Es evidente que nada de
esto ha ocurrido o está cerca de ocurrir, por lo que la tesis de que
Maduro es neoliberal flaquea en su premisa general.
Otro aspecto más
específico de dicha narrativa tiene que ver con la notable presencia que
ha adquirido el dólar en los últimos años como medio de pago y ahorro
en la población, parte de la flexibilización sobre el mercado cambiario
que comenzó desde 2018.
Entrevista con Mauro Vay Gonón, fundador y coordinador del Comité de Desarrollo Campesino (Codeca) de Guatemala.
En esta primera
parte de la entrevista con el legendario líder popular e indígena habla
sobre el conflicto armado (1961-1996) y la construcción de un nuevo
movimiento campesino desde las comunidades indígenas en Guatemala a
partir del año 1992.
Subraya en la
entrevista, la importancia de la creación del nuevo brazo político de
Codeca, el Movimiento para la Liberación de los Pueblos (MLP), que dos
veces fue rechazada por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) su
inscripción en las elecciones de junio 2023. Hace dos días también fue
avalada la sentencia del TSE por la Corte Suprema de Justicia. Es obvio
el miedo que la oligarquía guatemalteca tiene por el MLP que en las
encuestas casi está empatando con el candidato oficialista.
Esta decisión puede convertir a Guatemala en un segundo “Perú”, es
decir un levantamiento popular. Por eso advierte Mauro' Vay Gonón que el
poder fáctico guatemalteco, concentrado en la poderosa
organización CACIF, El Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas,
Comerciales, Industriales y Financieras [1] en alianza con el Ejército
“están provocando una nueva guerra en Guatemala”.
La represión y el terrorismo de estado, principalmente desde las
fuerzas militares hasta ahora han cobrado 25 vidas del movimiento
Codeca. El último líder fue asesinado el 5 de diciembre de 2022 después
de la entrevista que se realizó el 24 de noviembre de 2022 durante
el Segundo Encuentro del Abya Yala en las afueras de la Ciudad de
Guatemala, los días de 22-25 de noviembre.
“Todos los
contenidos del acuerdo de paz quedaron en vano, la pisotearon. La verdad
es triste para los guatemaltecos porque sinceramente nosotros no
deseamos que volvamos a una guerra. Pero ellos están buscando la manera
de provocar una nueva guerra”.
“Soy del pueblo Quiché, nací en una comunidad que se llama Las Pilas
de Retalhuleu. Pero de pequeño me trasladaron a Santo Domingo,
Suchitepéquez («en el cerro de las flores»). Ahí crecí y ahí vivo ahora.
Soy campesino, corto caña, corto algodón y milpa. Ese es mi trabajo”.
Como millones de su
pueblo humilde solo logró estudiar tres años, y así fue creciendo en la
escuela de verdad y de vida hasta que fundó la poderosa organización
campesina Codeca.
Cuenta que estuvo
en el movimiento campesino que en esa época de 80´ para luchar para
conseguir un salario de cinco quetzales (alrededor 0,8 usd) y se logró
3,20 quetzales al día.
El Gobierno tenía
un decreto de un (1) quetzal y 12 centavos, pero con la lucha de la
huelga que se hizo se logró tres quetzales y 20 centavos. Dice que se
intentó seguir la lucha en la zafra y de café, porque el objetivo era
cinco quetzales, pero ya no se logró porque el Ejército trató de
evitarlo con una compañía y perseguir a los líderes.
“En este caso yo estaba ahí y nos persiguieron”.
¿Incluso en la época de guerra de tierra arrasada?
“En ese tiempo
estaba iniciando la persecución fuerte de [general] Lucas García. Pues
nosotros empezamos a luchar dentro de esa represión y por eso nos
persiguieron con una compañía, con dos helicópteros, con comando, con
militares. . . Bueno, pero la jugamos y no nos encontraron, no nos
encontraron y pudimos escapar. Después de eso ya no había condiciones de
la lucha, en este caso campesina popular. Y tuvimos que tomar las armas
e integrarnos en el movimiento del EGP, Ejército Guerrilleros de los
Pobres”.
“Este movimiento
fue descabezado en la Costa Sur por el Ejército. Nos persiguieron.
Tuvimos que salir de nuestros lugares y ya en el 83 ́, volvimos, en este
caso yo volví para poder amnistiarme, y luego me integré en
las FAR (Fuerzas Armadas Rebeldes), y las FAR también fue descabezado en
el 88 ́. Nos quedamos sin contacto. Por eso en el año 1992 traté de
fundar al movimiento campesino Codeca e iniciar la lucha política
popular”.
Dice que no fue
fácil. Los campesinos comenzaron con los reclamos reivindicativos en
contra la explotación laboral, de salarios justos y la búsqueda del
acceso a la tierra “porque los campesinos no tenemos tierra y los que
conseguimos un par de días de trabajo es sobreexplotado”, agrega.
“Eran una jornada
exagerada. Salimos a las tres de la mañana y regresamos a veces a las 10
de la noche, muy temprano a las 8 de la noche, ganando un salario de
miseria. La lucha fue por ver cómo mejorar las condiciones laborales [y
el derecho a] la tierra”.
Pero no solamente eran reivindicaciones materiales. La Guerra Sucia
del estado guatemalteco, controlado por la oligarquía y unas fuerzas
armadas adoctrinadas en la “Seguridad Nacional” y del “enemigo interno”,
cobraba una altísima cuota de sangre del ser humano guatemalteco.
“Viendo la
necesidad de luchar por la defensa de los Derechos Humanos, ya que hay
tanta gente desaparecida y los familiares quieren saber por lo menos
donde encontrar los restos de sus seres queridos. Empezamos a luchar en
la defensa de los Derechos Humanos, buscando desaparecidos, en
cementerios clandestinos, exigiendo la excavación de las víctimas del
conflicto armado”.
Relata que
posteriormente la Codeca comenzó ya a trabajar sobre el derecho de la
participación de la mujer en la lucha, a trabajar como una línea de
acción y de organizar y formar a las compañeras mujeres para que se
involucraran en el proceso.
“Sucesivamente
miramos la necesidad que la lucha va más para las nuevas generaciones,
no para nosotros (de la generación mayor). Entonces lo ideal es que la
juventud desde ya empiece a involucrarse a conocer a participar y para
que en adelante tengamos un nuevo liderazgo joven. Empezamos a trabajar
la parte de la juventud”.
Guatemala como una
nación multicultural y de muchos pueblos originarios, por supuesto
dentro de esa lucha había que unir las luchas populares y
reivindicativas con las luchas de los derechos de los pueblos, nos
cuenta don Mauro.
“Yo soy quiché.
Pero nos encontramos con otros pueblos y pensamos ¿cómo empezar a
trabajar el entendimiento en la lucha dentro de la diversidad de los
pueblos? Empezamos a ver esa la tarea cómo entender y trabajar la parte
de la plurinacionalidad en la lucha que estamos haciendo”.
Un comandante del EGP se despide con un guerrillero que va a una misión.
El conflicto armado 1961-1996
· Hay que
decir que hay un desconocimiento muy grande en el mundo sobre el
conflicto armado que duró 36 años, en donde pueblos enteros, aldeas
enteras fueron totalmente erradicadas físicamente por parte del Ejército
y que casi 250.000 guatemaltecos fueron asesinados por un Ejército de
un Estado terrorista.
“Sí,
desgraciadamente en Guatemala hubo una crueldad tan grande que el
Ejército se convirtió en un Ejército asesino mercenario, criminal. El
Ejército se constituye para defender la soberanía de cualquier país.
Pero en Guatemala, el Ejército, los oficiales del alto mando en ese
tiempo, el comando el que trató de manejar la política de la persecución
de la represión de la tierra arrasada, entonces todos los soldados y
los oficiales se convirtieron como mercenarios, como asesinos
delincuentes. Llegaban a las casas a buscar a cualquier persona que
ellos decían que era un guerrillero. Esa fue la justificación para
entrar en una casa y secuestrar a la gente, robando todo lo que tiene.
A mi fueron a buscar en mi casa y se robaron toda la ropa, mi machete,
mis morrales, mi sombrero, todo lo que uso y toda la ropa de mi mujer y
de mis hijos se robaron. Nos dejaron sin nada, solo con la ropa encima”.
Era el orden del día en Guatemala en esa época de la pesadilla de
terror. Cuenta don Mauro que en las comunidades ellos arrasaron, se
llevaron los animales, los bienes que tenían los pueblos.
“Asesinaron mujeres
que estaban embarazadas. Con puro golpe le sacaron al niño. A los niños
los mataban así agarrando del piso, matando a una piedra o a un palo.
La verdad que es una situación triste lo que vivimos los guatemaltecos.
Tenemos testimonios de una de las masacres que hicieron en muchos
lugares donde juntaron a toda la gente, los amontonaron, los amarraron y
una vez que ya estaban amontonadas les tiraron granadas sobre granadas
hasta que miraron que ya era pura carne!”
“Tenían a una
persona como el espía de ellos. Pero para que no se quede testigo
amarraron al espía y tiraron el carro. O sea, el plan era matar al
último. Pero no se fijaron que dentro de la sangre quedó un anciano que
tenía el pie roto. Pero él se defendía con la misma carne y sangre de
las víctimas y quedó en medio de la carne. Después, que ya no había
bulla, se le reaccionó y se arrastró y se fue al monte y con el monte se
curó. Eso es lo que nos contó lo que pasó”.
“Y el otro testigo
fue el otro que lo llevaron, al ver que lo llevaban, sabía que lo iban a
matar. Pasó en un barranco, se aventó del carro y como el barranco era
grande, pensaron que se murió, pero no se murió. Son cosas y testimonios
que hemos encontrado de todo lo que pasó en la guerra. Pues en
Guatemala sufrimos desgraciadamente una masacre, una mortandad de
personas dirigidas por el alto mando del Ejército. No fue una guerra
sana. Yo por eso le decía a un oficial, en una ocasión que tuvo que
platicar con él, y le dije que yo les felicitaría si nos mataran en
combate. Porque ni modo, tenían la capacidad militar. Pero matar a una
mujer durmiendo con su marido, o matar a un niño en el piso, yo no me
entrenaría para eso. Desgraciadamente se entrenaron solo para hacer
eso”.
· ¿Qué dijo?
“Me dijo que “tiene razón”. Desgraciadamente me dijo, que no es culpa de todos los oficiales, sino que del alto mando”.
Ex presidente Otto Pérez y la guerra de genocidio
· El
expresidente Otto Pérez, todavía encarcelado, fue también uno de los
hombres de la inteligencia militar en esa época. ¿Qué responsabilidad
tiene él y qué pasó con el Acuerdo de Paz de 1996 que fue firmado, si no
me equivoco, en la capital noruega? ¿Y qué pasó con los generales
asesinos genocidas como Ríos Montt y el general Lucas García?
“De hecho Otto
Pérez Molina fue uno de los militares kaibiles que estuvieron
responsabilizando, o sea es responsable de muchas acciones de esa
naturaleza.
· Explícanos ¿qué son los kaibiles?
“Ese cuerpo de
kaibil lo formó el Ejército como los más asesinos y los más criminales
dentro de la institución del Ejército. Otto Pérez Molina fue uno de
esos. Molina no solo tiene (cargos) lo que hizo en el gobierno, sino
también el parte del genocidio que hubo en Guatemala. Estos oficiales,
de hecho, cometieron un genocidio. Desgraciadamente en Guatemala se
empezó a investigar a los responsables para poder castigarlo en base a
la ley. Fue así donde empieza el proceso de justicia en Guatemala que,
por lo mismo ellos, en vista de que fueron a investigar, empezaron a
perseguir a crear estructuras. O sea, ahorita el sistema de Justicia
está dirigido por militares. Esta finalidad lo hicieron conjuntamente
con el CACIF (El Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas,
Comerciales, Industriales y Financieras) [1] para poder promover la
corrupción al interior del organismo judicial”.
“Es por eso que ahorita están perseguidos los jueces por los fiscales
del Ministerio Público, todos aquellos que trabajaron con un poco de
imparcialidad están siendo perseguidos. Porque la estructura militar
está metida dentro de las estructuras del organismo judicial. ¿Por qué?
Porque se quiso ventilar, se quiso dar seguimiento a la recomendación
que se estableció en el Acuerdo de Paz verdad en cuanto a la Memoria
Histórica. Desgraciadamente, como ellos manejaron todo ese tipo de
cooptación del Estado, los acuerdos de paz quedaron en papel, no se
cumplió”.
“En el en el
Acuerdo quedó que el Ejército se debe de reducir y debe ocuparse sólo
con la defensa de la soberanía nacional en las fronteras. Pero ahorita
el Ejército es un Ejército bastante fuerte, cosa que no estamos en
guerra. Hay un gasto del estado en el gasto militar tan grande y es una
violación al Acuerdo de Paz. Si hablamos del Acuerdo de Paz ahorita,
todo se desvaneció. Eso podríamos decir que ahorita ellos mismos están
provocando una nueva guerra. Desgraciadamente el CACIF y el Ejército
están provocando una nueva guerra en violar todos los acuerdos de paz
que se estableció. Sí violaron un acuerdo más operativo como esa de la
reducción del Ejército, así también violaron los acuerdos sustantivos
como es el acuerdo socioeconómico situación agraria, el acuerdo de
identidad de los pueblos indígenas y lo del acuerdo de Derechos Humanos.
Por lo menos ahora hay una violación de Derechos Humanos constante
dirigido por el organismo judicial, el gobierno de Guatemala, el
congreso de la República y dirigido por el mismo Ejército. Todos los
contenidos del acuerdo de paz quedaron en vano, la pisotearon. La verdad
es triste para los guatemaltecos porque sinceramente nosotros no
deseamos que volvamos a una guerra. Pero ellos están buscando la manera
de provocar una nueva guerra. Ojalá no lleguemos a eso. Pero ellos están
creando las condiciones.
Dice don Mauro que no quisiera que llegara una nueva guerra, porque
una nueva guerra después de haber pasado una cree que una segunda guerra
interna va a ser un desastre para el pueblo de Guatemala,
específicamente para el Poder Fáctico:
“Porque ya ahorita
la población guatemalteca ya no cala en que decían, que los que luchamos
somos comunistas, somos terroristas porque ya ahorita se sabe que la
prensa corporativa lo que dice hay que entenderlo de manera contraria
para poder entender lo que está pasando. La población ahora pues ya se
da cuenta de esto. Pero la verdad es que lamento que sí el acuerdo de
paz quedó envanecido. Y desgraciadamente vivimos los guatemaltecos 36
años de asesinatos, de masacres, desapariciones, tierra arrasada y de
genocidio que es lo que vivimos, no es una guerra Santa, no es una
guerra real que hay enfrentamientos y se mueren en combate. No fue así,
sino que fueron masacres en las comunidades indefensas”.
Dice el ex
guerrillero que en la guerrilla pues no es tan fácil matarte porque
tienes un arma. Pero las comunidades desarmadas y el Ejército con esos
grandes equipos militares que tiene, la verdad es una vergüenza.
“Yo pienso que ser
un soldado, ser un oficial del Ejército, matando gente me sentiría tan
bajo porque me preparé para combatir, no para ser mercenario. Pero eso
es definitivamente lo que fue el Ejército de Guatemala. Yo se lo decía a
ese oficial, a mí me daría vergüenza prepararme para matar gente yo no
necesito ni una preparación para matar gente. No se prepara para
defender la soberanía nacional, que con gusto lo hacemos nosotros cuando
fue el problema de Belice. Nosotros nos presentamos voluntariamente con
el Ejército porque sabíamos que estaba defendiendo la soberanía
nacional. Pero matar gente inocente, la verdad que da vergüenza. Ahorita
alguien dice yo fui kaibil, púchica, fue la más cobarde. Porque mató
gente inocente, no tiene la capacidad de combate porque la que tiene la
capacidad de combate no mate una gente desarmada, mate una gente en
combate. Pero desgraciadamente han llegado a una situación totalmente
crítica, que da vergüenza sinceramente.
Jimmy Morales, el títere del Ejército
· El
hecho que un comediante como Jimmy Morales pueda llegar a la
presidencia (2015-2019) con el partido de la reserva militar en su
espalda, ¿es una expresión política o confirmación de que realmente el
carácter del Estado represivo todavía es vigente? En Ucrania también hay
un comediante en la presidencia. . .
“Sí, lo que pasa es
que en Guatemala han gobernado militares y otra gente que más o menos
tratan de camuflar lo que son. Pero últimamente se declararon personas
mercenarias. Utilizaron gente como el comediante Jimmy Morales que
calculaban que se presta para maniobrar o como títere, y lo utilizaron.
¿Con qué finalidad? Para poder sacar provecho y poder estructurarse bien
en el organismo judicial. Con esta finalidad metieron ahí a Jimmy
Morales y de ahí empezaron a cooptar al organismo judicial. En este
momento tienen a otro, que también no le vamos a decir que sea
diferente, porque es peor el que está ahorita, Alejandro Giammattei.
¿Qué estarán pensando, qué planes tienen”?
“Sabemos que llevan
un plan macabro en el país, utilizando cualquier tipo de títeres para
poder hacer su política. Los militares tienen controlado todos los tres
poderes del Estado, en este caso el Poder Judicial en conjunto con
el CACIF que están haciendo toda esta política de corrupción en
Guatemala”.
[1] El Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras