martes, 31 de enero de 2017
Delirio y perversión en el sionismo
Delirio y perversión en el sionismo
Hispantv
Considerando sólo los últimos 16 años, mediante una conducta de depravación evidente, la entidad sionista, encabezada por el Primer Ministro israelí Benjamín Netanyahu, ha sido protagonista de una política masiva de asesinatos contra la población palestina, tanto en la Franja de Gaza como en la Ribera Occidental.Herodes modernos
La suma total de víctimas en la sociedad palestina entre el año 2000 – cuando se inicia la segunda Intifada, en la Franja de Gaza cuando se concretan las autodenominadas: Operación Militar israelí Plomo Fundido, el año 2012 con la Operación Pilar Defensivo y la Operación Margen Protector del año 2014 unido a las agresiones contra los habitantes del West Bank en las ciudades de Al Quds (Jerusalén) Al Jalil (Hebrón) Bayt Lahm (Belén), Beit Jala, Ramallah, Tulkarm, Nablus, Ariha – Jericó - entre otras suma, aproximadamente, 13 mil muertos y 40 mil heridos – de los cuales 2.100 muertos son niños - a lo que hay que añadir 25 mil palestinos que han pasado por las cárceles israelíes de los cuales quedan 6 mil tras las rejas, 500 de ellos niños menores de 16 años.
En este mismo período la cantidad de muertos israelíes por acciones atribuidas a palestinos no sobrepasa las 950 muertes, la inmensa mayoría soldados y colonos sionistas – considerados fuerza beligerante - que ocupan tierras palestinas. No incluyo en esto las 190 muertes de soldados israelíes tras el fracaso de la invasión al Líbano el año 2006 en la guerra que enfrentó al sionismo contra Hezbolá y que generó una crisis de proporciones. El general mayor de la fuerza aérea del régimen de Israel, Amir Eshel, ha señalado que su país evitará cualquier tipo de guerra con Hezbolá.
Las acciones del sionismo han ido enfocadas en seguir consolidando la construcción de asentamientos en la Ribera occidental. Ello, a contrapelo de la legislación internacional, como fue la Resolución Nº 2334 de la ONU del 23 de diciembre del 2016, que reafirmó el carácter ilegal de los asentamientos en los territorios palestinos del West Bank. Pocos países han levantado la voz para exigir este cumplimiento. En el caso de Irán, la nación persa lleva la voz cantante y ha instado a la comunidad internacional a cumplir con su responsabilidad inherente, aumentar las presiones contra la entidad sionista e impedir que se materialicen las políticas agresivas y expansionistas de dicho régimen, como también impedir que se concrete el traslado de la Embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Al Quds.
Analistas como Norman Finkelstein – estadounidense de religión judía e hijo de supervivientes de los campos de concentración nazis en Auschwitz y Majdanek – en su libro “Método y locura: La historia oculta de los ataques de Israel en Gaza”- da a conocer que el repetido recurso a la guerra más salvaje por parte de los gobiernos de Israel dista mucho de ser irracional: “en realidad, afirma Finkelstein, los ataques de Israel han sido diseñados para sabotear un posible compromiso de paz con los palestinos, aún cuando los términos de este les favorezca ampliamente”. En esta postura del sionismo, y a la vista de las cifras de víctimas de las operaciones militares israelíes, se ha dicho que esta desproporción en el número de víctimas ocasionadas y las víctimas propias tiene un carácter delirante y patológico.
Una Infame ideología
¿Es así? ¿Sufre la entidad sionista de una patología delirante? Si entendemos por delirio aquella sicopatología donde se destacan temas tales como sentirse perseguido, además de presentar visiones de grandeza o megalomanía - un pueblo elegido convocado a una misión divina - la entidad sionista, al interpretar la realidad de manera distorsionada, es entonces delirante, pues tiene una ruptura con la realidad circundante, sin capacidad autocrítica y sin un pensamiento coherente y lógico. Se autoconvence que aquello que hace, por más criminal que sea tiene un objetivo superior: la grandeza y la seguridad del sionismo a partir de una orientación de un dios exclusivo y excluyente.
El delirio se genera a partir de una interpretación distorsionada de la realidad. Allí donde todos ven una conducta de agresión, el delirante habla de autodefensa. Allí donde los organismos internacionales hablan de la necesidad de detener la construcción de muros y asentamientos que segregan y usurpan territorio palestino, el delirante habla de la necesidad de proteger sus fronteras. Donde el pueblo palestino, en uso moral y legal de actos de defensa de su territorio ejecuta acciones de autodefensa contra tropas y colonos ocupantes, el delirante habla de terrorismo ocultando así su propia política colonialista, racista y criminal.
En el plano político no se conocen medidas preventivas contra el delirio, por ello resulta importante que ante las sospechas de estos síntomas, que en el caso del sionismo son lisa y llanamente un claro diagnóstico de una enfermedad grave pero no por ello inimputable frente a hechos delictivos. Por ello, los organismos internacionales, las sociedades debemos definir cursos de acción encaminados a proteger a los pueblos que sufren la acción de políticos, religiosos, colonos, instituciones civiles y militares aquejados de esta patología.
Es indudable, a la luz de la conducta histórica del sionismo, que esta ideología y su expresión estructural bajo el nombre de Israel es una entidad dotada de una conducta de perversión donde la moral y los valores están absolutamente trastocados. La perversión, como concepto aplicable al actuar político y militar de la entidad sionista, supone a un gobierno y miembros de esa sociedad que actúan con conductas invertidas, normalmente no aceptadas y moralmente incorrectas, que buscan a través de la puesta en práctica de esas acciones perversas el placer del dominio mediante el uso del terror.
Actos perversos contra la población palestina ejecutada por soldados y colonos: asesinar a sangre fría, detener y torturar, impedir la libre circulación de los habitantes del territorio. Impedir ejercer sus acciones religiosas. Demoler las viviendas – 5 mil de ellas destruidas hasta sus cimientos desde el año 200 a la fecha - destruir sus cosechas, arrancar de raíz sus árboles de olivos, cercar sus ciudades con muros y alambradas. Hacer uso de la llamada ley de Ausencia, que permite apropiarse (robar) la casa de un no judío al que se ha obligado a huir. Impedir el uso de bienes como el agua y la electricidad. Generar guetos, carreteras exclusivas para colonos.
La lista de actos perversos suma y sigue: cercar con check points las tierras palestinas, impidiendo la libre circulación de la población palestina. Judaizar Al Quds. Construir asentamientos y poblarlos de colonos extremistas en territorio palestino, impedir el desarrollo cultural, eliminar todo rastro lingüístico de nombres árabes. Negar el regreso de los refugiados de la Nakba. Rematar en el suelo a hombres y mujeres palestinos heridos. Detener a menores de edad. Maltratar a ancianos y mujeres. Segregar a la población mediante el uso de documentos diferenciadores.
Así, el apartheid practicado por Israel contra la población palestina deja de ser un simple recurso argumentativo y se convierte en una realidad- El propio Tribunal Russel Para Palestina, reunido en la Ciudad del Cabo – Sudáfrica – el año 2011 que convocó a destacados juristas internacionales concluyó que “Israel somete al pueblo palestino a un régimen institucionalizado de dominación considerado apartheid por el derecho internacional” bajo el marco de la Resolución 3379 de la Asamblea General de la ONU, aprobada el 10 de noviembre de 1975, equiparó al sionismo con el racismo en general y con el apartheid sudafricano en particular, y llamó a su eliminación, entendiéndola como una forma de discriminación racial.
Toda esa larga lista de acciones perversas del sionismo no cesa y se fundan en una ideología que reúne las características propias de una ideología fascista: Nacionalismo, autoritarismo y etnocentrismo, que ve al palestino como un animal, un ser inferior, alguien sin derechos frente al supuesto pueblo elegido, a quien un dios extraño, veleidoso y excluyente le concedió una tierra ajena y ha hecho de ese mito una razón fundante. Una ideología que bajo el actual régimen israelí preconiza un Estado “étnicamente puro”. Esa perversión se funda en actos de una ideología nacionalsionista, que encuentra su expresión y verbalización en líderes israelíes que alientan el odio, la segregación y el crimen de los Goys – no judíos – calificando a los palestinos como animales a los cuales hay que exterminar.
Perversión como la del ex Primer Ministro Menahem Begin, nacido en Bielorrusia, quien el año 1982 declaró ante el parlamento israelí el carácter infrahumano de los palestinos “se lo digo, apenas son humanos”. Perversión como la del también ex Primer Ministro Ehud Barack, de padres lituanos, quien en la segunda Intifada advertía a los israelíes: “los palestinos son como los cocodrilos, cuanta más carne les dan, más quieren”. Palabras complementadas con las “piadosas” expresiones del rabino Yizhak Ginsburg, nacido en Estados Unidos quien señalaba: “la sangre judía y la sangre de los Goys no es la misma y en ese plano, matar no es un crimen si las víctimas no son judías”. El fallecido Yizhak Shamir, de origen bielorruso y ex Primer Ministro, quien vociferaba a los cuatros vientos: “Aplastaremos a los palestinos como a langostas, aplastaremos sus cabezas contra las rocas y los muros”.
Como no referir en este breve recuento las palabras del actual Ministro de Defensa, el colono ultranacionalista de origen moldavo Avigdor Lieberman quien propuso aplicar en Gaza, el año 2009 tras la operación Plomo Fundido “lo que hizo Japón al final de la segunda guerra mundial”. Y dentro de estas ideas tan propias de los líderes de la autodenominada “mayor democracia de Oriente Medio” destaca la de Ayelet Shaked, actual Ministra de Justicia y ex diputada por el partido Hogar judío quien sostuvo que, “Detrás de cada terrorista hay decenas de hombres y mujeres sin los cuales no podría atentar. Ahora todos son combatientes enemigos, y su sangre caerá sobre sus cabezas. Incluso las madres de los mártires, que los envían al infierno con flores y besos. Nada sería más justo que siguieran sus pasos. Estas madres deberían desaparecer junto a sus hogares, donde han criado a estas serpientes. De lo contrario, criarán más pequeñas serpientes".
El delirio, la perversión, la megalomanía, son partes componentes del sionismo, constituyen parte del engranaje de una ideología que así como EIIL –Daesh en árabe – constituye una perversión del islam, con el cual no tiene nada que ver, así también el sionismo del régimen israelí en palestina constituye una perversión criminal del judaísmo, tal como lo ha declarado la organización de rabinos Neturei Karta, convencidos de la incompatibilidad entre las enseñanzas del judaísmo y una entidad denominada Israel asentada sobre la fuerza de las armas, el pillaje y el sufrimiento de todo un pueblo.
Según Moshé Machover, matemático y filósofo israelí radicado en Inglaterra, la idea de un pueblo judío es "una falsa idea promovida por la ideología sionista: el mito de que los judíos en todo el mundo son una nación antigua, exiliada por la fuerza de su antigua patria, la tierra de Israel" continuar en esa idea, tratar de imponerla y ocupar tierras ajenas es una conducta delirante, como perversa es el uso de prácticas violatorias de los derechos humanos de millones de palestinos en pos de ese objetivo mitológico.
Fuente original: http://www.hispantv.com/noticias/opinion/331620/sionismo-palestinos-israel-netanyahu-gaza-cisjordania
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
La suma total de víctimas en la sociedad palestina entre el año 2000 – cuando se inicia la segunda Intifada, en la Franja de Gaza cuando se concretan las autodenominadas: Operación Militar israelí Plomo Fundido, el año 2012 con la Operación Pilar Defensivo y la Operación Margen Protector del año 2014 unido a las agresiones contra los habitantes del West Bank en las ciudades de Al Quds (Jerusalén) Al Jalil (Hebrón) Bayt Lahm (Belén), Beit Jala, Ramallah, Tulkarm, Nablus, Ariha – Jericó - entre otras suma, aproximadamente, 13 mil muertos y 40 mil heridos – de los cuales 2.100 muertos son niños - a lo que hay que añadir 25 mil palestinos que han pasado por las cárceles israelíes de los cuales quedan 6 mil tras las rejas, 500 de ellos niños menores de 16 años.
En este mismo período la cantidad de muertos israelíes por acciones atribuidas a palestinos no sobrepasa las 950 muertes, la inmensa mayoría soldados y colonos sionistas – considerados fuerza beligerante - que ocupan tierras palestinas. No incluyo en esto las 190 muertes de soldados israelíes tras el fracaso de la invasión al Líbano el año 2006 en la guerra que enfrentó al sionismo contra Hezbolá y que generó una crisis de proporciones. El general mayor de la fuerza aérea del régimen de Israel, Amir Eshel, ha señalado que su país evitará cualquier tipo de guerra con Hezbolá.
Las acciones del sionismo han ido enfocadas en seguir consolidando la construcción de asentamientos en la Ribera occidental. Ello, a contrapelo de la legislación internacional, como fue la Resolución Nº 2334 de la ONU del 23 de diciembre del 2016, que reafirmó el carácter ilegal de los asentamientos en los territorios palestinos del West Bank. Pocos países han levantado la voz para exigir este cumplimiento. En el caso de Irán, la nación persa lleva la voz cantante y ha instado a la comunidad internacional a cumplir con su responsabilidad inherente, aumentar las presiones contra la entidad sionista e impedir que se materialicen las políticas agresivas y expansionistas de dicho régimen, como también impedir que se concrete el traslado de la Embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Al Quds.
Analistas como Norman Finkelstein – estadounidense de religión judía e hijo de supervivientes de los campos de concentración nazis en Auschwitz y Majdanek – en su libro “Método y locura: La historia oculta de los ataques de Israel en Gaza”- da a conocer que el repetido recurso a la guerra más salvaje por parte de los gobiernos de Israel dista mucho de ser irracional: “en realidad, afirma Finkelstein, los ataques de Israel han sido diseñados para sabotear un posible compromiso de paz con los palestinos, aún cuando los términos de este les favorezca ampliamente”. En esta postura del sionismo, y a la vista de las cifras de víctimas de las operaciones militares israelíes, se ha dicho que esta desproporción en el número de víctimas ocasionadas y las víctimas propias tiene un carácter delirante y patológico.
Una Infame ideología
¿Es así? ¿Sufre la entidad sionista de una patología delirante? Si entendemos por delirio aquella sicopatología donde se destacan temas tales como sentirse perseguido, además de presentar visiones de grandeza o megalomanía - un pueblo elegido convocado a una misión divina - la entidad sionista, al interpretar la realidad de manera distorsionada, es entonces delirante, pues tiene una ruptura con la realidad circundante, sin capacidad autocrítica y sin un pensamiento coherente y lógico. Se autoconvence que aquello que hace, por más criminal que sea tiene un objetivo superior: la grandeza y la seguridad del sionismo a partir de una orientación de un dios exclusivo y excluyente.
El delirio se genera a partir de una interpretación distorsionada de la realidad. Allí donde todos ven una conducta de agresión, el delirante habla de autodefensa. Allí donde los organismos internacionales hablan de la necesidad de detener la construcción de muros y asentamientos que segregan y usurpan territorio palestino, el delirante habla de la necesidad de proteger sus fronteras. Donde el pueblo palestino, en uso moral y legal de actos de defensa de su territorio ejecuta acciones de autodefensa contra tropas y colonos ocupantes, el delirante habla de terrorismo ocultando así su propia política colonialista, racista y criminal.
En el plano político no se conocen medidas preventivas contra el delirio, por ello resulta importante que ante las sospechas de estos síntomas, que en el caso del sionismo son lisa y llanamente un claro diagnóstico de una enfermedad grave pero no por ello inimputable frente a hechos delictivos. Por ello, los organismos internacionales, las sociedades debemos definir cursos de acción encaminados a proteger a los pueblos que sufren la acción de políticos, religiosos, colonos, instituciones civiles y militares aquejados de esta patología.
Es indudable, a la luz de la conducta histórica del sionismo, que esta ideología y su expresión estructural bajo el nombre de Israel es una entidad dotada de una conducta de perversión donde la moral y los valores están absolutamente trastocados. La perversión, como concepto aplicable al actuar político y militar de la entidad sionista, supone a un gobierno y miembros de esa sociedad que actúan con conductas invertidas, normalmente no aceptadas y moralmente incorrectas, que buscan a través de la puesta en práctica de esas acciones perversas el placer del dominio mediante el uso del terror.
Actos perversos contra la población palestina ejecutada por soldados y colonos: asesinar a sangre fría, detener y torturar, impedir la libre circulación de los habitantes del territorio. Impedir ejercer sus acciones religiosas. Demoler las viviendas – 5 mil de ellas destruidas hasta sus cimientos desde el año 200 a la fecha - destruir sus cosechas, arrancar de raíz sus árboles de olivos, cercar sus ciudades con muros y alambradas. Hacer uso de la llamada ley de Ausencia, que permite apropiarse (robar) la casa de un no judío al que se ha obligado a huir. Impedir el uso de bienes como el agua y la electricidad. Generar guetos, carreteras exclusivas para colonos.
La lista de actos perversos suma y sigue: cercar con check points las tierras palestinas, impidiendo la libre circulación de la población palestina. Judaizar Al Quds. Construir asentamientos y poblarlos de colonos extremistas en territorio palestino, impedir el desarrollo cultural, eliminar todo rastro lingüístico de nombres árabes. Negar el regreso de los refugiados de la Nakba. Rematar en el suelo a hombres y mujeres palestinos heridos. Detener a menores de edad. Maltratar a ancianos y mujeres. Segregar a la población mediante el uso de documentos diferenciadores.
Así, el apartheid practicado por Israel contra la población palestina deja de ser un simple recurso argumentativo y se convierte en una realidad- El propio Tribunal Russel Para Palestina, reunido en la Ciudad del Cabo – Sudáfrica – el año 2011 que convocó a destacados juristas internacionales concluyó que “Israel somete al pueblo palestino a un régimen institucionalizado de dominación considerado apartheid por el derecho internacional” bajo el marco de la Resolución 3379 de la Asamblea General de la ONU, aprobada el 10 de noviembre de 1975, equiparó al sionismo con el racismo en general y con el apartheid sudafricano en particular, y llamó a su eliminación, entendiéndola como una forma de discriminación racial.
Toda esa larga lista de acciones perversas del sionismo no cesa y se fundan en una ideología que reúne las características propias de una ideología fascista: Nacionalismo, autoritarismo y etnocentrismo, que ve al palestino como un animal, un ser inferior, alguien sin derechos frente al supuesto pueblo elegido, a quien un dios extraño, veleidoso y excluyente le concedió una tierra ajena y ha hecho de ese mito una razón fundante. Una ideología que bajo el actual régimen israelí preconiza un Estado “étnicamente puro”. Esa perversión se funda en actos de una ideología nacionalsionista, que encuentra su expresión y verbalización en líderes israelíes que alientan el odio, la segregación y el crimen de los Goys – no judíos – calificando a los palestinos como animales a los cuales hay que exterminar.
Perversión como la del ex Primer Ministro Menahem Begin, nacido en Bielorrusia, quien el año 1982 declaró ante el parlamento israelí el carácter infrahumano de los palestinos “se lo digo, apenas son humanos”. Perversión como la del también ex Primer Ministro Ehud Barack, de padres lituanos, quien en la segunda Intifada advertía a los israelíes: “los palestinos son como los cocodrilos, cuanta más carne les dan, más quieren”. Palabras complementadas con las “piadosas” expresiones del rabino Yizhak Ginsburg, nacido en Estados Unidos quien señalaba: “la sangre judía y la sangre de los Goys no es la misma y en ese plano, matar no es un crimen si las víctimas no son judías”. El fallecido Yizhak Shamir, de origen bielorruso y ex Primer Ministro, quien vociferaba a los cuatros vientos: “Aplastaremos a los palestinos como a langostas, aplastaremos sus cabezas contra las rocas y los muros”.
Como no referir en este breve recuento las palabras del actual Ministro de Defensa, el colono ultranacionalista de origen moldavo Avigdor Lieberman quien propuso aplicar en Gaza, el año 2009 tras la operación Plomo Fundido “lo que hizo Japón al final de la segunda guerra mundial”. Y dentro de estas ideas tan propias de los líderes de la autodenominada “mayor democracia de Oriente Medio” destaca la de Ayelet Shaked, actual Ministra de Justicia y ex diputada por el partido Hogar judío quien sostuvo que, “Detrás de cada terrorista hay decenas de hombres y mujeres sin los cuales no podría atentar. Ahora todos son combatientes enemigos, y su sangre caerá sobre sus cabezas. Incluso las madres de los mártires, que los envían al infierno con flores y besos. Nada sería más justo que siguieran sus pasos. Estas madres deberían desaparecer junto a sus hogares, donde han criado a estas serpientes. De lo contrario, criarán más pequeñas serpientes".
El delirio, la perversión, la megalomanía, son partes componentes del sionismo, constituyen parte del engranaje de una ideología que así como EIIL –Daesh en árabe – constituye una perversión del islam, con el cual no tiene nada que ver, así también el sionismo del régimen israelí en palestina constituye una perversión criminal del judaísmo, tal como lo ha declarado la organización de rabinos Neturei Karta, convencidos de la incompatibilidad entre las enseñanzas del judaísmo y una entidad denominada Israel asentada sobre la fuerza de las armas, el pillaje y el sufrimiento de todo un pueblo.
Según Moshé Machover, matemático y filósofo israelí radicado en Inglaterra, la idea de un pueblo judío es "una falsa idea promovida por la ideología sionista: el mito de que los judíos en todo el mundo son una nación antigua, exiliada por la fuerza de su antigua patria, la tierra de Israel" continuar en esa idea, tratar de imponerla y ocupar tierras ajenas es una conducta delirante, como perversa es el uso de prácticas violatorias de los derechos humanos de millones de palestinos en pos de ese objetivo mitológico.
Fuente original: http://www.hispantv.com/noticias/opinion/331620/sionismo-palestinos-israel-netanyahu-gaza-cisjordania
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
`Para Cuba la cultura de EEUU no es desconocida o exótica: una ventaja frente a la guerra cultural´
http://www.cubainformacion.tv/index.php/cultura/72680-para-cuba-la-cultura-de-eeuu-no-es-desconocida-o-exotica-una-ventaja-frente-a-la-guerra-culturala
Jesús Arboleya es uno de los mayores expertos cubanos en las relaciones Cuba-EEUU. Doctor en Ciencia Históricas, escritor, comentarista internacional en medios como teleSUR o Progreso Semanal, este profesor titular del Instituto de Relaciones Internacionales `Raúl Roa García´ (ISRI) nos recibe en su casa de La Habana.
Analizamos el presente, pasado y futuro de las relaciones entre ambos países y gobiernos. Nos dice que, ante la ofensiva ideológica y cultural desde el Norte, Cuba cuenta con una ventaja: que existe en el país un gran conocimiento de la cultura de EEUU, que no es algo exótico, ya que el contacto cultural permanente se remonta al origen de las dos naciones. `La cultura cubana –nos explica- está influenciada por la de EEUU desde siempre, en la música, los filmes, etc.´, lo que `no es algo malo´ en sí mismo.
Explica que Cuba es un crisol, una sociedad culturalmente mestiza, que ha conseguido `metabolizar culturas de fuera y las ha convertido en propias´. Hasta el propio reggaeton, señala: `existe incluso un reggaeton cubano´.
Por ello, Cuba es una sociedad `antixenófoba´.
Preguntado por las nuevas tácticas desde la Casa Blanca para influir cultural e ideológicamente en la sociedad cubana, Arboleya nos dice que `el gobierno de EEUU quiere influir no solo por esas vías, sino por todas: por la economía, la cultura, los medios de comunicación y el contacto entre personas´. Pero `una cosa es querer y otra es poder´, matiza.
De hecho, los famosos viajes `people to people´, que la Casa Blanca autoriza con la pretensión de que las personas visitantes de EEUU `contaminen de democracia y valores liberales´ la sociedad cubana, en el fondo consiguen un efecto inverso: `si se hiciera un estudio –asegura Arboleya- la mayoría de estaounidenses regresa de Cuba con una percepción muy distinta y más positiva de la realidad del país´.
Acerca de un hipotético levantamiento del bloqueo, asegura que `para Cuba, EEUU es su mercado natural´, y en términos económicos supondría un despegue inmediato, teniendo en cuenta solo los costos de flete para importar y exportar. `Pero –matiza- ya sabemos el coste de la dependencia´, por lo que el antídoto en ese escenario no puede ser otro que el de la `intervención decidida del Estado cubano´ para evitar dicho mecanismo de dominación por dependencia económica.
Sobre ciertas decepciones en algunas personas de izquierda, que consideran que el diálogo con EEUU sería una `concesión de Cuba´, Jesús Arboleya recuerda que `la razón del cambio de política de EEUU hacia Cuba no fue humanitaria. Fue la resistencia cubana, ayudada por la solidaridad internacional, la que consiguió una victoria histórica y sin paliativos de la Revolución cubana´ sobre el imperialismo norteamericano.
Eso sí, ahora en Cuba `se imponen nuevas maneras de enfrentar la hegemonía de EEUU´, un país que `no tiene relaciones normales con ningún país del mundo, incluso con muchos de sus aliados´. De hecho, las `contradicciones entre ambos gobiernos seguirán, porque no hay un solo punto en materia de política internacional en que Cuba y EEUU se puedan poner de acuerdo´.
Por ello, Arboleya cree que, más que `normalización de relaciones´ entre Cuba y EEUU, lo que se debe perseguir es una `convivencia entre contrarios´.
Equipo de producción de Cubainformación TV (video y fotografías): Patricia Moncada, José Manzaneda, Karoly Emerson, Emerio Rodríguez. Colaboración especial: ICAP. Edición: Javier Matabuena.
José Manzaneda
Coordinador de Cubainformación
Tel.: 94-4151107
|
¿Sabe usted que EEUU aún mantiene el bloqueo económico contra Cuba?
www.cubavsbloqueo.cu/es
`La creación por la Revolución de los círculos infantiles supuso un salto en los derechos de las mujeres cubanas´
Elena Aurora Rodríguez Mora es una de tantas miles de combatientes de la Revolución cubana que, con su inmensa entrega, hicieron posible llevar adelante programas sociales que se adelantaron a su tiempo y hoy siguen siendo faro para tantos países del Sur.
Aurora fue miembro del Comité Nacional de la Federación de Mujeres Cubanas durante años, entre otras funciones desempeñadas. En esta entrevista le preguntamos por su participación en la creación de los primeros Círculos Infantiles (sistema de guarderías públicas creado por la Revolución), y también sobre los avances y desafíos pendientes en materia de igualdad entre hombres y mujeres en la Isla.
Equipo de producción de Cubainformación TV (video y fotografías): Patricia Moncada, José Manzaneda, Karoly Emerson, Emerio Rodríguez. Colaboración especial: ICAP. Edición: Javier Matabuena.
Esperando a los bárbaros. Por Constantino Cavafis por Iroel Sánchez
Esperando a los bárbaros. Por Constantino Cavafispor Iroel Sánchez |
-¿Qué esperamos congregados en el foro?
Es a los bárbaros que hoy llegan.
-¿Por qué esta inacción en el Senado?
¿Por qué están ahí sentados sin legislar los Senadores?
Porque hoy llegarán los bárbaros.
¿Qué leyes van a hacer los senadores?
Ya legislarán, cuando lleguen, los bárbaros.
-¿Por qué nuestro emperador madrugó tanto
y en su trono, a la puerta mayor de la ciudad,
está sentado, solemne y ciñendo su corona?
Porque hoy llegarán los bárbaros.
Y el emperador espera para dar
a su jefe la acogida. Incluso preparó,
para entregárselo, un pergamino. En él
muchos títulos y dignidades hay escritos.
-¿Por qué nuestros dos cónsules y pretores salieron
hoy con rojas togas bordadas;
por qué llevan brazaletes con tantas amatistas
y anillos engastados y esmeraldas rutilantes;
por qué empuñan hoy preciosos báculos
en plata y oro magníficamente cincelados?
Porque hoy llegarán los bárbaros;
y espectáculos así deslumbran a los bárbaros.
-¿Por qué no acuden, como siempre, los ilustres oradores
a echar sus discursos y decir sus cosas?
Porque hoy llegarán los bárbaros y
les fastidian la elocuencia y los discursos.
-¿Por qué empieza de pronto este desconcierto
y confusión? (¡Qué graves se han vuelto los rostros!)
¿Por qué calles y plazas aprisa se vacían
y todos vuelven a casa compungidos?
Porque se hizo de noche y los bárbaros no llegaron.
Algunos han venido de las fronteras
y contado que los bárbaros no existen.
¿Y qué va a ser de nosotros ahora sin bárbaros?
Esta gente, al fin y al cabo, era una solución.
domingo, 29 de enero de 2017
Endesa, que se sitúa a la cabeza, emite el 10% de todas las emisiones de España y concentra la cuarta parte de todas las que emiten los sectores fijos
Endesa, que se sitúa a la cabeza, emite el 10% de todas las emisiones de España y concentra la cuarta parte de todas las que emiten los sectores fijos
Estas son las 20 empresas que generan el 80% del CO2 en España
Infolibre
Por comunidades autónomas, Andalucía –con un 19% del total de las emisiones de fuentes fijas– es la que más contamina |
El estudio señala que España emitió en 2015 un total de 337 millones de toneladas totales de GEI (gases de efecto invernadero), de las que la industria y la energía emitieron 137,1 millones de toneladas de CO2 verificadas por el Renade. En general, las emisiones crecieron un 3,3% en total en España respecto a 2014, mientras que "prácticamente todos los países de la UE descendían".
Así, los sectores fijos representan el 40,4% (137,1 millones de toneladas) del total de las emisiones de CO2 españolas. Mientras, el 59,6% de las emisiones correspondieron a fuentes de emisión difusas, tales como el transporte, los hogares, los servicios o la agricultura.
Además, el informe destaca que las emisiones de los sectores fijos se concentran en un núcleo de 10 empresas, que emiten el 69,4% o lo que es lo mismo, 95,2 millones de toneladas, de las emisiones de gases de efecto invernadero totales.
Se trata de Endesa, con 33,3 millones de toneladas de CO2; Repsol (incluye Petronor), con 13 millones de toneladas; Gas natural Fenosa, con 12,9 millones de toneladas de CO2; Hidrocantábrico, 10,6 millones de toneladas de CO2; ArcelorMittal, 6,4 millones de toneladas de CO2; E.On, 5,3 millones de toneladas de CO2; Cepsa, 4,8 toneladas de CO2; Cemex, 3,4 millones de toneladas de CO2; Iberdrola, 2,6 millones de toneladas de CO2 y Cementos Portland, 2,4 millones de toneladas de CO2.
Solamente Endesa emite el 10% de todas las emisiones de España, tanto las fijas como las difusas y concentra la cuarta parte de todas las que emiten los sectores fijos. A esta le siguen Gas Natural Fenosa y Repsol, que suponen un 4 por ciento aproximado cada una del total emitido en España.
En total, los sectores fijos con mayores emisiones se deben a la producción energética, las industrias con grandes procesos de combustión, el tratamiento y transformación de hidrocarburos, la industria del cemento y la transformación química.
La generación de carbón supone 50 millones de toneladas equivalentes de CO2 y supone el 72,3% de la generación total de energía, que produce en su conjunto la mitad de las emisiones fijas totales nacionales, que son casi 70 millones de toneladas de CO2.
En cuanto a la producción de cemento y cal, generan 17 millones de toneladas, el 12,5% del total, algo más que las de las refinerías de petróleo y coque (14 millones de toneladas de CO2, el 10,5%). Las industrias que dependen de grandes procesos de combustión emiten el 8,5% del total, casi 12 millones de toneladas de CO2; el resto de la industria contribuye con el 18% restante (casi 25 millones de toneladas de CO2).
Andalucía es la que más contamina
Por comunidades autónomas, la más emisora es Andalucía, con el 19% del total de las emisiones de las fuentes fijas de España. A esta le siguen Asturias (16%), Galicia (11%), Cataluña (10%) y Castilla y León (9%), precisamente las zonas donde están instaladas las grandes centrales de carbón excepto en Cataluña, donde la incidencia de las emisiones se debe al importante sector industrial y refinero.
Por el contrario, las comunidades autónomas que menos CO2 emiten son Navarra, Madrid, Extremadura, Cantabria y La Rioja, justo aquellas cuya economía está menos basada en el carbón.
Fuente: http://www.infolibre.es/noticias/politica/2017/01/27/estas_son_las_empresas_que_generan_del_co2_espana_60369_1012.html
Así, los sectores fijos representan el 40,4% (137,1 millones de toneladas) del total de las emisiones de CO2 españolas. Mientras, el 59,6% de las emisiones correspondieron a fuentes de emisión difusas, tales como el transporte, los hogares, los servicios o la agricultura.
Además, el informe destaca que las emisiones de los sectores fijos se concentran en un núcleo de 10 empresas, que emiten el 69,4% o lo que es lo mismo, 95,2 millones de toneladas, de las emisiones de gases de efecto invernadero totales.
Se trata de Endesa, con 33,3 millones de toneladas de CO2; Repsol (incluye Petronor), con 13 millones de toneladas; Gas natural Fenosa, con 12,9 millones de toneladas de CO2; Hidrocantábrico, 10,6 millones de toneladas de CO2; ArcelorMittal, 6,4 millones de toneladas de CO2; E.On, 5,3 millones de toneladas de CO2; Cepsa, 4,8 toneladas de CO2; Cemex, 3,4 millones de toneladas de CO2; Iberdrola, 2,6 millones de toneladas de CO2 y Cementos Portland, 2,4 millones de toneladas de CO2.
Solamente Endesa emite el 10% de todas las emisiones de España, tanto las fijas como las difusas y concentra la cuarta parte de todas las que emiten los sectores fijos. A esta le siguen Gas Natural Fenosa y Repsol, que suponen un 4 por ciento aproximado cada una del total emitido en España.
En total, los sectores fijos con mayores emisiones se deben a la producción energética, las industrias con grandes procesos de combustión, el tratamiento y transformación de hidrocarburos, la industria del cemento y la transformación química.
La generación de carbón supone 50 millones de toneladas equivalentes de CO2 y supone el 72,3% de la generación total de energía, que produce en su conjunto la mitad de las emisiones fijas totales nacionales, que son casi 70 millones de toneladas de CO2.
En cuanto a la producción de cemento y cal, generan 17 millones de toneladas, el 12,5% del total, algo más que las de las refinerías de petróleo y coque (14 millones de toneladas de CO2, el 10,5%). Las industrias que dependen de grandes procesos de combustión emiten el 8,5% del total, casi 12 millones de toneladas de CO2; el resto de la industria contribuye con el 18% restante (casi 25 millones de toneladas de CO2).
Andalucía es la que más contamina
Por comunidades autónomas, la más emisora es Andalucía, con el 19% del total de las emisiones de las fuentes fijas de España. A esta le siguen Asturias (16%), Galicia (11%), Cataluña (10%) y Castilla y León (9%), precisamente las zonas donde están instaladas las grandes centrales de carbón excepto en Cataluña, donde la incidencia de las emisiones se debe al importante sector industrial y refinero.
Por el contrario, las comunidades autónomas que menos CO2 emiten son Navarra, Madrid, Extremadura, Cantabria y La Rioja, justo aquellas cuya economía está menos basada en el carbón.
Fuente: http://www.infolibre.es/noticias/politica/2017/01/27/estas_son_las_empresas_que_generan_del_co2_espana_60369_1012.html
Tierra, trabajo y justicia Darío Aranda Greenpeace
Tierra, trabajo y justicia
Greenpeace
Productor diversificado, con hincapié en el cuidado del ambiente y el autoconsumo familiar. Parte de una cooperativa de productores, de una yerba emblemática y, también, poeta.“En su ciego afán de lucro / muchos pretenden ignorar / los crímenes cometidos desde tiempos inmemoriales. Ya es hora que terminemos con esta barbaridad / por eso les invito, que tengamos como meta / la lucha por defender a la madre naturaleza”. El que escribe, y lee, es Hugo Gunter, productor de yerba y poeta de Oberá, que comercializa mediante la marca Titrayju (conformada por las primeras sílabas de “Tierra, trabajo y justicia”), de la Cooperativa Río Paraná de Misiones.
Gunter recibe en su chacra de Oberá. 65 años, chomba blanca, gorra con visera y orgullo de su campo. Lleva a recorrer y exhibe su producción. Maíz, maní, mandioca, batata, arroz y chanchos. Recibió el campo de su padre, y los trabaja junto a su familia.
Cuenta con 62 hectáreas. 22 son de yerba, sin uso de agroquímicos. A lo largo de la charla dirá varias veces que priorizan el “cuidado del ambiente” y “el autoconsumo” . No se define como agricultor biodinámico, pero aclara que siempre tienen en cuenta la luna. “Creciente llena para sembrar y cosechar cultivos de arriba de la tierra. Para los de abajo de la superficie, en menguante nueva”, precisa.
Descree del “matacampo” (agroquímicos) . Avisa que no sirven, “destruye todo, no queda ni un bichito” y afirma que eso “no es sano”. Y de golpe sonríe: “Pero los agrónomos no me dan bola”. Y ahí hace una diferencia: “Hay ingenieros de estudio y hay ingenieros de poner el lomo”. Sonríe.
Rechaza el modelo dominante de agricultura. Explica que con solo mirar a los grandes ganadores se sabe también a quiénes perjudica. Entre los primeros ubica a las empresas Bayer, Basf, Monsanto. “Facturan más que un país entero. Esos tipos manejan el mundo”, advierte.Gunter vende su producción a la yerba Titrayju, de pequeños chacareros de Misiones que rechazan vender sus cosechas a bajo precio y que desde 2001 se comercializa en Buenos Aires, Rosario, Mendoza, Córdoba y una decenas de capitales de provincia. Es una marca emblemática, pionera, popularizada al calor de las fábricas recuperadas, movimientos de desocupados y organizaciones campesinas (en particular el Movimiento Agrario de Misiones). Son más de 50 chacras que forman parte de la Cooperativa Río Paraná, apuestan al “comercio justo”, que implica que cada eslabón de la cadena de producción obtenga lo proporcional al trabajo invertido, y proponen el “consumo responsable”, que al comprar un producto se reconozca a quién se beneficia y se tengan en cuenta las condiciones laborales que las grandes marcas esconden.
La Cooperativa procesa 300 mil kilos de hoja verde, lo que equivale a 120 mil kilogramos de yerba. Otros principio básicos son el cuidado del ambiente, que las familias puedan desarrollarse en su territorio y que puedan permanecer en sus chacras (una forma de combatir el proceso de desalojos y migración interna que el país experimenta desde hace décadas).
Gunter muestra su maíz, también libre de transgénicos y venenos. Pero de golpe comienza una lluvia torrencial. Asegura que se puede producir sin químicos, que hay alimentos de sobra y no logra comprender cómo con “tanta riqueza en la tierra, hay tanta necesidad” en la población.
Y despide con otro poema (aclara que no de su autoría):
“El derecho es para el de arriba, las obligaciones para los demás. Por cada harapiento y transpirado, hay otro que vive de traje y aire acondicionado. Aquel que labra la tierra, para arrancarle el sustento, lo hace con sacrificio a su exclusivo riesgo, a la peste, al clima, a la demanda, a los precios. Sin embargo el que especula, el intermediario o el comercio, gana el doble que el digno chacarero, que lucha para producir, para que otros ganen con eso”.
Darío Aranda es periodista especializado en extractivismo (petróleo, minería, agronegocios y forestales). Trabaja en el diario Página/12, la cooperativa de comunicación La Vaca y las radios FM Kalewche (Esquel), la Cooperativa La Brújula (Rosario) y Los Ludditas (FM La Tribu). Escribe sobre pueblos indígenas, organizaciones campesinas y asambleas socioambientales. Además es autor de “Argentina originaria: genocidios, saqueos y resistencias” y “Tierra Arrasada. Petróleo, soja, pasteras y megaminería.”
En el marco de la campaña de Agroecología, escribió una serie de artículos vinculados a la temática de la agricultura ecológica. Todos los jueves publicaremos en nuestro blog una nota contando diferentes aspectos y testimonios sobre este tema. No te pierdas este especial sobre el futuro de los alimentos en la Argentina.
Fuente: http://www.greenpeace.org.ar/blog/tierra-trabajo-y-justicia/17973/
Leé más sobre este tema: Agricultura ecológica. Caso Misiones: La cuna de la yerba mate.
Gunter recibe en su chacra de Oberá. 65 años, chomba blanca, gorra con visera y orgullo de su campo. Lleva a recorrer y exhibe su producción. Maíz, maní, mandioca, batata, arroz y chanchos. Recibió el campo de su padre, y los trabaja junto a su familia.
Cuenta con 62 hectáreas. 22 son de yerba, sin uso de agroquímicos. A lo largo de la charla dirá varias veces que priorizan el “cuidado del ambiente” y “el autoconsumo” . No se define como agricultor biodinámico, pero aclara que siempre tienen en cuenta la luna. “Creciente llena para sembrar y cosechar cultivos de arriba de la tierra. Para los de abajo de la superficie, en menguante nueva”, precisa.
Descree del “matacampo” (agroquímicos) . Avisa que no sirven, “destruye todo, no queda ni un bichito” y afirma que eso “no es sano”. Y de golpe sonríe: “Pero los agrónomos no me dan bola”. Y ahí hace una diferencia: “Hay ingenieros de estudio y hay ingenieros de poner el lomo”. Sonríe.
Rechaza el modelo dominante de agricultura. Explica que con solo mirar a los grandes ganadores se sabe también a quiénes perjudica. Entre los primeros ubica a las empresas Bayer, Basf, Monsanto. “Facturan más que un país entero. Esos tipos manejan el mundo”, advierte.Gunter vende su producción a la yerba Titrayju, de pequeños chacareros de Misiones que rechazan vender sus cosechas a bajo precio y que desde 2001 se comercializa en Buenos Aires, Rosario, Mendoza, Córdoba y una decenas de capitales de provincia. Es una marca emblemática, pionera, popularizada al calor de las fábricas recuperadas, movimientos de desocupados y organizaciones campesinas (en particular el Movimiento Agrario de Misiones). Son más de 50 chacras que forman parte de la Cooperativa Río Paraná, apuestan al “comercio justo”, que implica que cada eslabón de la cadena de producción obtenga lo proporcional al trabajo invertido, y proponen el “consumo responsable”, que al comprar un producto se reconozca a quién se beneficia y se tengan en cuenta las condiciones laborales que las grandes marcas esconden.
La Cooperativa procesa 300 mil kilos de hoja verde, lo que equivale a 120 mil kilogramos de yerba. Otros principio básicos son el cuidado del ambiente, que las familias puedan desarrollarse en su territorio y que puedan permanecer en sus chacras (una forma de combatir el proceso de desalojos y migración interna que el país experimenta desde hace décadas).
Gunter muestra su maíz, también libre de transgénicos y venenos. Pero de golpe comienza una lluvia torrencial. Asegura que se puede producir sin químicos, que hay alimentos de sobra y no logra comprender cómo con “tanta riqueza en la tierra, hay tanta necesidad” en la población.
Y despide con otro poema (aclara que no de su autoría):
“El derecho es para el de arriba, las obligaciones para los demás. Por cada harapiento y transpirado, hay otro que vive de traje y aire acondicionado. Aquel que labra la tierra, para arrancarle el sustento, lo hace con sacrificio a su exclusivo riesgo, a la peste, al clima, a la demanda, a los precios. Sin embargo el que especula, el intermediario o el comercio, gana el doble que el digno chacarero, que lucha para producir, para que otros ganen con eso”.
Darío Aranda es periodista especializado en extractivismo (petróleo, minería, agronegocios y forestales). Trabaja en el diario Página/12, la cooperativa de comunicación La Vaca y las radios FM Kalewche (Esquel), la Cooperativa La Brújula (Rosario) y Los Ludditas (FM La Tribu). Escribe sobre pueblos indígenas, organizaciones campesinas y asambleas socioambientales. Además es autor de “Argentina originaria: genocidios, saqueos y resistencias” y “Tierra Arrasada. Petróleo, soja, pasteras y megaminería.”
En el marco de la campaña de Agroecología, escribió una serie de artículos vinculados a la temática de la agricultura ecológica. Todos los jueves publicaremos en nuestro blog una nota contando diferentes aspectos y testimonios sobre este tema. No te pierdas este especial sobre el futuro de los alimentos en la Argentina.
Fuente: http://www.greenpeace.org.ar/blog/tierra-trabajo-y-justicia/17973/
Leé más sobre este tema: Agricultura ecológica. Caso Misiones: La cuna de la yerba mate.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
Yemen Un genocidio en el extremo inferior de la Península Arábiga.
Yemen
Un desastre en el extremo inferior de la Península Arábiga. Vincent Durac. The Conversation.
Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández. |
Destrucción causada por los bombardeos del pasado año en la sureña ciudad de Taiz. La ONU calcula que dos terceras partes de los yemeníes necesitan ayuda humanitaria. (Getty)
En la punta sur de la Península Arábiga, la desastrosa guerra del Yemen lleva casi dos años arrasándolo todo. En cierto modo eclipsada por la devastadora crisis en Siria, es, sin embargo, una catástrofe inmensa: según las Naciones Unidas, han perdido la vida más de 10.000 personas y más de 20 millones (de una población total de 27 millones de habitantes) necesitan ayuda humanitaria. Hay más de tres millones de seres internamente desplazados y, asimismo, varios cientos de miles han huido del país. La amenaza de hambruna inminente es cada vez mayor a medida que el conflicto ha ido destruyendo la producción alimentaria en el país.Esta guerra tiene sus raíces en el levantamiento popular de 2011. Esa rebelión destituyó al presidente de larga data Ali Abdullah Saleh, cuyo partido, el Congreso General del Pueblo (CGP) lleva dominando la vida política del país desde la unificación del Yemen en 1990. Pero lo que realmente desencadenó el conflicto, que se inició en 2015, fueron los años de fracasadas negociaciones para un período transitorio que siguieron al derrocamiento de Saleh.
El movimiento de protesta se extendió velozmente por todo el país, a los jóvenes manifestantes se unieron pronto los partidos establecidos, así como los separatistas del sur del Yemen y el movimiento hutí.
El movimiento hutí surgió en los primeros años del 2000; en pocas palabras, se trata de un movimiento revivalista chií zaidí que trata de corregir la marginación de la importante minoría zaidí en el Yemen, cuya oposición al régimen de Saleh estalló en un conflicto de gran violencia en seis ocasiones diferentes entre 2004 y 2010.
Cuando las deserciones del ejército tras el levantamiento de 2011 amenazaron con desencadenar una guerra civil, el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), con el apoyo de la ONU y diversos Estados occidentales, presentó una iniciativa en función de la cual Saleh traspasaba el poder a su adjunto, Abd-Rabbo Mansur Hadi, a la vez que su CGP pasaba a compartir el poder junto a una alianza de partidos de la oposición.
Teresa May debate sobre el conflicto del Yemen durante una reunión anual de los dirigentes del Golfo en Bahréin celebrada el mes pasado. (Getty)
La iniciativa del CCG sacó adelante una Conferencia para la Diálogo Nacional, que tenía como objetivo abordar el amplio conjunto de retos a que se enfrentaba el país reuniendo a representantes de todas las orientaciones políticas, así como a actores regionales y a la sociedad civil. Pero el proceso fracasó desde el principio, resultando imposible lograr un acuerdo sobre cómo debería ser un futuro Yemen federal.Durante el período de transición, el movimiento hutí reforzó su bastión en la provincia de Saada, al noroeste del Yemen, y empezó a ampliar su control territorial hacia el sur. Para esto contó con el apoyo activo de Saleh, su antiguo enemigo, y con elementos de su antiguo régimen, que sentían también que habían perdido demasiado en el nuevo reparto político.
Bombardeos en la capital, Sanaa, en septiembre de 2016. (Getty)
Como la situación política y económica en Yemen continuaba deteriorándose –hubo más muertos durante el período transitorio que durante el levantamiento de 2011-, la oposición de los hutíes hacia un régimen considerado cada vez más corrupto e ilegítimo fue ganando apoyos más amplios.En enero de 2014, el gobierno de Hadi anunció un plan para recortar los subsidios gubernamentales a los carburantes, a fin de asegurarse el apoyo exterior del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional. Esto hizo subir los precios del combustible más de un 90%, lo que provocó, como es lógico, una extendida indignación popular.
Los hutíes se aprovecharon de este malestar para entrar en la capital del país, Sanaa, y consiguieron el acuerdo de los principales partidos políticos con una nueva serie de medidas que podrían haber puesto el proceso de transición otra vez en marcha: la formación de un nuevo gobierno integrador, la retirada de los combatientes hutíes de los territorios de los que se habían apoderado y una revisión de la estructura estatal del Yemen.
Pero ni el gobierno ni los hutíes respetaron finalmente sus compromisos. En cambio, los hutíes formaron un gobierno en la sombra para, al parecer, supervisar los ministerios y combatir la corrupción. Y cuando Hadi trató de forzar un esquema federalista al que se oponían y que violaba claramente anteriores acuerdos, arrestaron a un asesor presidencial y rodearon el palacio presidencial. Tras meses de presiones, Hadi y su gobierno dimitieron en enero de 2015.
Unas semanas más tarde, en una nueva provocación, los hutíes designaron un “consejo revolucionario” mediante una “declaración constitucional” y marcharon hacia el sur, hacia la ciudad portuaria de Aden, a la cual había escapado Hadi antes de retractarse de su dimisión y restablecer su gobierno. Enfrentado a este avance de los hutíes, Hadi finalmente escapó al exilio.
Fue en ese momento cuando el conflicto se internacionalizó. Arabia Saudí, con el apoyo de otros nueve Estados, lanzó una ofensiva aérea masiva con el declarado objetivo de restaurar el gobierno de Hadi y rechazar el avance hutí.
Entierro de familiares en Bajil, un día después del ataque lanzado en octubre por la coalición liderada por los saudíes. (Getty)
Desde entonces, todos los intentos de poner fin al conflicto han terminado en fracaso.Las conversaciones en Kuwait entre los bandos opuestos se vinieron abajo en agosto de 2016. El meollo del conflicto fue un acuerdo patrocinado por la ONU que proponía un diálogo político entre las facciones enfrentadas una vez que los rebeldes hutíes se hubieran retirado de Sanaa y entregado su armamento pesado a un comité militar, que estaría organizado por Hadi. El acuerdo coincidía en gran medida con la posición del gobierno de Hadi, por lo que los hutíes lo rechazaron, insistiendo en un nuevo gobierno de unidad que pusiera fin realmente al mandato de Hadi.
Otros esfuerzos acabaron resultando igualmente insuficientes. El 16 de octubre, el enviado especial de la ONU al Yemen, Ould Cheij Ahmed, anunció un alto el fuego de 72 horas en un conflicto que por entonces llevaba ya 19 meses asolando el país fundamentalmente para permitir el reparto de ayuda humanitaria. Pero si aún quedaba alguna esperanza, pronto se esfumó; los combates se reanudaron en cuanto transcurrió ese período de tres días. Un alto el fuego de 48 horas establecido en noviembre de 2016, acabó del mismo modo.
Según están las cosas, no parece haber ninguna solución política a la vista. E incluso si apareciera alguna, Yemen tiene que enfrentarse ahora a mayores desafíos que nunca. El conflicto ha forjado una serie de inestables alianzas en ambos bandos. Los hutíes están aliados con restos del régimen de Saleh, mientras que la alianza contra los hutíes está integrada por islamistas sunníes, incluyendo a al-Qaida en la Península Arábiga y al ISIS, a una mezcla diversa de separatistas del sur y a los remanentes del gobierno reconocido internacionalmente.
Se trata de una guerra tremendamente compleja y entenderla no es fácil. La consecuencia es que se ha convertido en parte de una narrativa regional de conflicto sectario, con los chiíes zaidíes, considerados apoderados de los iraníes, en conflicto con los sunníes, apoyados por los saudíes. Por simplista y engañosa que sea esta narrativa, está muy arraigada y eso hace que el conflicto sea aún más difícil de resolver.
Por ahora, parece que la violencia continúa. Mientras tanto, el país se enfrenta a una crisis humanitaria de proporciones extraordinarias que ningún acuerdo político va a poder solucionar fácilmente.
Vincent Durac es profesor en la Escuela de Relaciones Políticas e Internacionales del University College de Dublin.
Fuente: http://theconversation.com/yemen-a-calamity-at-the-end-of-the-arabian-peninsula-67954
Esta traducción puede reproducirse libremente a condición de respetar su integridad y mencionar al autor, a la traductora y a Rebelión.org como fuente de la misma.
Medios públicos, guerras mediáticas y desafíos democráticos en America Latina. En definitiva, la relación entre la realidad de los poderes mediaticos criminales y la "democracia" (sic) es pura ilusión óptica, porque la realidad es una vil real dictadtura que cuesta muchísimo luchar contra ella por su propia naturaleza de macro estafa por ir disfrazada de "libertad" y "democracia" siendo una GRAN MENTIRA.. Ignacio Ramonet.
José Martí y el abrazo de Fidel Castro. Por Luis Toledo Sande por Iroel Sánchez
José Martí y el abrazo de Fidel Castro. Por Luis Toledo Sandepor Iroel Sánchez |
¿He de decir a usted cuánto propósito soberbio, cuánto potente arranque hierve en mi alma? ¿que llevo mi infeliz pueblo en mi cabeza, y que me parece que de un soplo mío dependerá en un día su libertad?
(Carta de José Martí a Manuel Mercado, 6 de julio de 1878)
Lector voraz como José Martí, Fidel Castro pudo haber escrito de sí palabras con que el primero se autocaracterizó: “Napoleón nació sobre una alfombra donde estaba la guerra de Europa. // Yo debí nacer sobre una pila de libros”. Pero el propio Martí plasmó en otro apunte una confesión que complementa la citada y es igualmente aplicable a Fidel: “el libro que más me interesa es el de la vida, que es también el más difícil de leer, y el que más se ha de consultar en todo lo que se refiere a la política, que al fin y al cabo es el arte de asegurar al hombre el goce de sus facultades naturales en el bienestar de la existencia”.
De no haber seguido ambos esa guía, habrían incurrido en un vacío esterilizante para el pensamiento y la acción: esperar hasta ver si de las metrópolis del mundo les llegaban las respuestas necesarias para interpretar y enfrentar los graves problemas que ellos se plantearon resolver creativamente. Eran desafíos que no se limitaban a Cuba: les llegarían asimismo de nuestra América, de la del Norte y aun del resto del planeta, y ambos fraguaron una guía contra el colonialismo cultural, viniera este de donde viniera, o —pensemos en hoy— venga de donde venga.
El camino para valorar con acierto la presencia en Fidel del hombre a quien él llamó “el más genial y el más universal de los políticos cubanos”, y “guía eterno de nuestro pueblo”, no se halla en buscar coincidencias de temperamentos —tema que desborda este artículo—, y menos aún en hacer meros cotejos textuales. De esto último se percató el articulista al hacer la selección y escribir el prólogo —los dos con firma institucional del Centro de Estudios Martianos— del volumen de páginas de Fidel titulado José Martí, el autor intelectual (1983).
Inmenso fue el abono textual en los actos de Martí y de Fidel, y en la imantación del primero sobre el segundo; pero un modo seguro para valorar la relación entre ellos no lo dará el criterio —de punta hegeliana— encallado en considerar que las ideas vienen no más de las ideas. Ambos fueron conscientes de la dignidad de estas, y de su valor para iluminar la práctica, pero sabían que sus raíces determinantes se hallan en el subsuelo de la realidad.
Ese hecho debe tenerse en cuenta al ponderar por qué Fidel declaró a Martí autor intelectual de los sucesos del 26 de julio de 1953, y en consecuencia —vale añadir— de la etapa revolucionaria que, desatada entonces, llega al presente y continúa viva hacia el futuro. Quien, como había hecho su predecesor en 1874 —aunque no obtuvo el título por falta de dinero para el pago establecido—, en 1950 se graduó de abogado, asumió su autodefensa cuando se le juzgó por aquellos acontecimientos, que él había encabezado. De algún modo eso recuerda al adolescente que en 1869 se irguió contra las autoridades colonialistas en el juicio en que se le impuso prisión y trabajo forzado.
En su alegato Fidel ratificó lo que había dicho en interrogatorios previos: Martí era el mentor de aquella acción revolucionaria. Pero no sentaba con tal declaración, ni con las páginas que citó o glosó del Apóstol, una mera estrategia discursiva para valerse del prestigio de su palabra. Apuntaba a los propósitos de la acción.
Metas heredadas
Protagonizada por combatientes de distintas partes del país, y con la actualización de miras necesaria entonces, la gesta buscaba abrirle camino de realización a lo que no le fue dado al proyecto martiano consumar. Para ello el líder que crecía acometió en los escritos —en las ideas— de Martí una búsqueda de la cual dejó huellas en el ejemplar de sus Obras completas que leyó en la cárcel con pasión apreciable en subrayados y anotaciones.
En acto de justicia histórica, ese lector pudo proclamar que los hechos de 1953, cuando se había celebrado el centenario del Apóstol, se habían concebido y llevado a cabo para impedir que él muriese de tanta negación sufrida por su legado. Aquel régimen era un instrumento de la potencia imperialista, ya en apogeo, que en 1898, cuando aún se consolidaba, perpetró planes que Martí quiso impedir a tiempo: consistían en apoderarse de Cuba y de Puerto Rico para, con esa fuerza más, dominar a nuestra América toda, y empezar a dislocar el equilibrio del mundo hasta convertirse en nación hegemónica.
Sin enfrentar semejante realidad sería imposible acometer a fondo el saneamiento de la República implantada en 1902, medularmente contraria a la república moral por la que luchó Martí. Esta, que no era una lección liquidada en el siglo XIX, merecía y debía retomarse como raíz de la Cuba revolucionaria, llamada a erigirse sobre bases republicanas nuevas y erradicar la herencia de la colonia y la presencia del neocolonialismo.
Al conmemorar, veinte años después, los ígneos sucesos de 1953, Fidel será particularmente explícito al decir: “Martí nos enseñó su ardiente patriotismo, su amor apasionado a la libertad, la dignidad y el decoro del hombre, su repudio al despotismo y su fe ilimitada en el pueblo. En su prédica revolucionaria estaba el fundamento moral y la legitimidad histórica de nuestra acción armada. Por eso dijimos que él fue el autor intelectual del 26 de Julio”. Y en el camino trazado por Martí se empinó en 1976 la República socialista fundada con la guía de Fidel y cuya Constitución la preside esta aspiración martiana: “que la ley primera de la república sea el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre”.
En “El tercer año del Partido Revolucionario Cubano”, artículo publicado en Patria el 17 de abril de 1894 y subtitulado “El alma de la Revolución, y el deber de Cuba en América”, Martí estampó lo que significaba la independencia de Cuba para toda nuestra América y para asegurar el equilibrio mundial. Por ello sostuvo: “Quien se levanta hoy con Cuba se levanta para todos los tiempos”.
Esa idea —validada por la historia— la desarrolló en varios textos, como el Manifiesto de Montecristi. En este, fechado 25 de marzo de 1895, a la guerra iniciada el 24 del mes anterior la llamó “suceso de gran alcance humano y servicio oportuno que el heroísmo juicioso de las Antillas presta a la firmeza y trato justo de las naciones americanas, y al equilibrio aún vacilante del mundo”. En la misma fecha, sabiéndose “en el pórtico de un gran deber” —pues marchaba a ocupar su lugar en la contienda de liberación nacional que él había preparado—, le escribió al amigo dominicano Federico Henríquez y Carvajal la carta donde ratificó sus propósitos, y aseguró: “Yo alzaré el mundo”.
Palabras, ideas, hechos
Sin asomo de vanidad, expresaba así un optimismo que hace pensar en el de Fidel cuando, tras la dispersión causada en la tropa expedicionaria por el revés militar del desembarco del yate Granma, se vio rodeado de un exiguo grupo de compañeros con escasos pertrechos, y exclamó: “¡Ahora sí ganamos la guerra!”.
Martí expresaba la convicción que, declarada desde años atrás, ratificaría también el día antes de caer en combate, en otra carta testamentaria, la dirigida a su amigo mexicano Manuel Mercado: urgía impedir que se hicieran realidad los planes expansionistas de los Estados Unidos, y contra ellos enfilaba él sus actos, como le confesó a Mercado: “Cuanto hice hasta hoy, y haré, es para eso”, aunque en lo visible se combatía contra el ejército español.
Esa senda de alcance planetario la tomó también el Fidel que, en la Sierra Maestra, reaccionó ante la destrucción de la casa de un campesino por una bomba estadounidense lanzada desde un avión de la tiranía. Entonces el líder rebelde le hizo a una compañera de lucha, Celia Sánchez, la confesión que no sería simple impulso emocional, sino todo un programa. Una vez lograda la victoria contra la tiranía, se dedicaría a lo que fue central en sus actos y en sus ideas, hasta su muerte: luchar contra el imperialismo.
Esa actitud era necesaria para poner a la patria en camino de erradicar la miseria que la mayoría del pueblo sufría, y crear las condiciones para el desarrollo educacional y las conquistas culturales que se insertaran definitivamente en el rumbo trazado por Martí: “Ser culto es el único modo de ser libre”. Tan sembrador concepto ubicaba lo cultural en una dimensión inseparable del libro y la lectura, pero irreductible a lo libresco academicista, y que requería ejercer el pensamiento propio.
No hay que asombrarse, pues, de que en la aludida autodefensa de Fidel en el juicio que se le aplicó en 1953 se halle, mucho más que citas de Martí, una manera de ver la realidad por sus ojos, y sin nubes pasatistas contrarias a la capacidad de germinación del legado martiano. Sobre tales bases, el 29 de mayo de 1955, desde las páginas de Bohemia, al desmentir falsedades de un esbirro sanguinario, afirmó: “es el Apóstol el guía de mi vida”. Para abrazar la herencia de Martí, su más logrado discípulo y continuador no se contentó con hallar en sus textos una fuente de aforismos elegantes, sino —homenaje raigal si los hay— una brújula para la vida.
La frase que da título al alegato, La historia me absolverá, remite al discurso que Martí pronunció el 17 de febrero de 1892 y se conoce como La oración de Tampa y Cayo Hueso. Con la convicción ética sobre lo que se hace, terminó refiriéndose a la labor unitaria que llevaría a fundar el Partido Revolucionario Cubano: “¡[…] la historia no nos ha de declarar culpables!”. En el alegato, donde Fidel insistió en cuán costoso habría sido para el pueblo cubano dejar morir a su Apóstol, la huella de este es tan omnipresente que el mejor modo de mostrarla es reproducir todo el texto.
Ante un apotegma del peso de “primero se hundirá la isla en el mar antes que consintamos en ser esclavos de nadie”, ¿cómo no recordar la terminación del discurso de Martí en el Steck Hall neoyorquino el 24 de enero de 1880? Allí el orador sentenció: “¡Antes que cejar en el empeño de hacer libre y próspera a la patria, se unirá el mar del Sur al mar del Norte, y nacerá una serpiente de un huevo de águila!” También sostuvo: “Ignoran los déspotas que el pueblo, la masa adolorida, es el verdadero jefe de las revoluciones”, idea que se siente en la base del concepto de pueblo sustentado en La historia me absolverá.
Memoria del corazón
Así de orgánico fue, es, el abrazo de Fidel a Martí. En español la etimología del verbo recordar habla de lo que se vuelve a traer al corazón —como no solo en sentido figurado concierne a ese órgano el vocablo cordial—, y en otras lenguas aprender de memoria se dice aprender de corazón. Tal es la manera como procede entender la asunción de textos martianos por Fidel.
A lo visto con respecto a La oración de Tampa y Cayo Hueso y La historia me absolverá, añádase, entre otros posibles ejemplos, el pasaje de la carta del 15 de diciembre de 1893 en que Martí le dice a Antonio Maceo: “Yo no trabajo por mi fama, puesto que toda la del mundo cabe en un grano de maíz”. Esa declaración la condensó Fidel en una máxima que ha recorrido el planeta: “Toda la gloria del mundo cabe en un grano de maíz”. Martí habló de la fama, y su discípulo, que alcanzó el poder y siempre se manifestó dispuesto a mantener a raya el asedio de la gloria, hizo de aquel texto una apropiación que rebasa el plano lexical.
Toda recreación legítima y de altura ofrece destellos sugerentes. El líder de la Revolución Cubana, refiriéndose al heroísmo de su pueblo, años después del triunfo de 1959, en medio de la brutal hostilidad imperialista, dijo que no solamente merecía la victoria y un sitio en la historia, sino también “un lugar en la gloria”. Al replantear aforísticamente lo dicho por Martí a Maceo subrayó, acaso sin proponérselo, el valor de lo elemental natural. A una eminente estudiosa de Martí, iluminada por el patriotismo y la poesía, le oyó el autor de este artículo decir al respecto: “Eso habla de lo grandes que son la humildad y un grano de maíz”.
El culto a la humildad por parte de Martí y de Fidel es el propio de los seres extraordinarios, no la resignación a la intrascendencia. Alguien como Martí puede sostener lo que, dicho sin su grandeza, puede parar en la injusticia y la ingratitud: “Nada es un hombre en sí, y lo que es, lo pone en él su pueblo. En vano concede la Naturaleza a algunos de sus hijos cualidades privilegiadas; porque serán polvo y azote si no se hacen carne de su pueblo, mientras que si van con él, y le sirven de brazo y de voz, por él se verán encumbrados, como las flores que lleva en su cima una montaña”.
El pueblo solamente puede depositar la energía propia de la grandeza, y una confianza a esa altura, en quienes tengan fuerza para cargar con ellas. Tal relación entre individualidad y colectivo, entre líder y pueblo, explica la permanencia de Martí en la memoria y en la querencia de la patria, y la capacidad de Fidel para abrazar esa lección y darle continuidad fecundante en un camino donde ambos fijaron la estrella de su impronta personal.
Un logro de semejante envergadura sería impensable sin el talento que ambos tuvieron, y sin el valor que supieron dar a la unidad revolucionaria, fomentada por ellos con la autoridad moral de su entrega a la lucha con una actitud que recuerda la citada carta de Martí a Henríquez y Carvajal: “hay que dar respeto y sentido humano y amable, al sacrificio”.
En él, ese logro lo corroboró su capacidad de supervivencia tras la muerte, capacidad que se consumó por su propio poder de irradiación, por el empeño de luchadores lúcidos que retomaron su legado y por el fervor que merecidamente generó en el pueblo. Así la herencia patriótica y revolucionaria de quien en el presidio pasó “sereno entre los viles” se mantuvo incorruptible en medio del cieno de la República neocolonial.
De luz en luz
Asimismo el legado del líder de la etapa de luchas conocida por antonomasia como Revolución Cubana vivirá por encima de su muerte. Si brilló de un modo especial —recordemos palabras de Ernesto Che Guevara— en “los días luminosos y tristes de la crisis del Caribe”, desde la noche del 25 de noviembre de 2016 le ha dado a la patria días tristes, por las dimensiones de la pérdida, pero también luminosos, por las reservas de potencialidad patriótica y revolucionaria que el pueblo ratificó ante su partida.
Al definir en Patria la naturaleza de la revolución que se gestaba para independizar y sanear el país, Martí expresó confianza en el pueblo. Lo hizo con la certidumbre que le proporcionaba comprobar que a los patriotas residentes en el país y a los que, como él, habían tenido que emigrar los unían ideales y acción.
Con esa luz apreció que en todos primaba la voluntad de servir a la patria: “Viles tenemos, pero más grandes que viles. Habrá un humilde para cada soberbio: seremos ala de aquella otra ala. Y con dos alas, volaremos mejor. No somos hombres aquí: somos amigos del hombre. No somos pasiones aquí: somos pabilo que se consume para que nuestro pueblo luzca: alfombra somos, para que pise nuestro pueblo”.
Tal era la tesitura de quien echaba su suerte “con los pobres de la tierra”, y así preludió la que Fidel definiría como revolución “de los humildes, por los humildes y para los humildes”. Ni uno ni otro serían bien vistos por quienes aspirasen a perpetuarse sentados sobre las espaldas del pueblo, y que, por tanto, servirían al amo, yanqui o español —como escribe Martí a Mercado en su carta póstuma—, que les asegurase tal privilegio.
En esa carta, refiriéndose al eventual destino que pudiera asignarle la asamblea de representantes del pueblo insurrecto —aunque difícilmente se le hubiera confiado a otro, viviendo él, la guía de la República en armas—, afirmó: “Sé desaparecer. Pero no desaparecería mi pensamiento, ni me agriaría mi oscuridad”. Pensaba en la posible oscuridad del destino aludido, no en la suya, pues no la había en él. Hombre luz, añadió: “Y en cuanto tengamos forma, obraremos, cúmplame esto a mí, o a otros”.
Tras contingencias y tragedias históricas —en las cuales sobresalió su propia muerte en combate— fue necesario esperar a que, sobre la base de lo braceado después de la tragedia de Dos Ríos, la generación del centenario martiano, vanguardia conducida por Fidel, obrase para hacer realidad los planes del Maestro. En el camino labrado por esa avanzada patriótica —cuyo empeño condujo a la victoria de 1959— creció, afán tras afán, siembra tras siembra de ideales, logro tras logro, la significación de Fidel.
El culto a la memoria de Martí incluyó la diseminación de bustos y otros recursos iconográficos que —en medio de la realidad política dominante, que lo negaba— jalonaron la permanencia de su legado junto a la difusión de su obra escrita y a la prédica basada en sus ideas. Tras más de medio siglo de consumación de esa herencia a la altura de tiempos signados por ideales socialistas, Fidel coronó en vísperas de su muerte una idea que mantuvo a lo largo de su vida como líder: pidió que no se diera su nombre a instituciones, a sitio alguno del país.
Cimas contra la muerte
Con lealtad a su ejemplo, continuando por el camino correcto la obra que él abonó y dejó marcada por su grandeza —tan inimitable como paradigmática: Fidel es Fidel, se ha dicho, como también es justo decir Martí es Martí—, podrá el pueblo mantener vivo su legado junto al del Maestro. En la Cuba revolucionaria es cuestión de haber empezado ya a cumplir ese afán, para que generaciones futuras no tengan que levantarse con el fin de impedir que ellos mueran.
Sería absurdo sustituir el entendimiento de tal continuidad por el afán de escoger, como en un cuadrilátero de boxeo, a un triunfador individual, ignorando las diferencias de épocas y las calidades extraordinarias que hacen de ambos las cimas singulares que son. Tal vez Fidel, quien, como Martí, encarnó la capacidad zahorí de vislumbrar el futuro, quiso también prevenir que el entusiasmo y la falta de mesura —el no llegar o pasarse— condujeran a sobresaturaciones vaciadoras de sentido, cuando no patéticas.
Tal pudiera ser el caso de la sugerencia hecha por un profesional cubano de la información mientras reportaba para una televisora amiga, desde la Plaza de la Revolución José Martí, el tributo póstumo que allí la multitud conmovida rendía a Fidel y, por extensión, al Martí que daba cobijo histórico y moral a un acto de tan entrañable justicia. Según la peregrina sugerencia aludida, cabía rebautizar la Plaza con el nombre del líder recién fallecido.
En esa Plaza, que seguirá honrándose con el nombre y la imagen de Martí, y con la presencia del Fidel que allí protagonizó junto al pueblo imborrables capítulos de la vida revolucionaria de la nación, ambos viven, y vivirán como en todo lo bueno que se haga en la patria. Los une el abrazo con que asumió Fidel el legado del Maestro, cuyos restos mortales ya los suyos acompañan de cerca: los custodian.
Ambos seguirán convocando al pueblo a no olvidar ni traicionar su historia, a no cesar ni flaquear en la defensa de la justicia, de la equidad, de la independencia y la soberanía, a no sucumbir a tentaciones economicistas, a la prosperidad sin alma. Para cumplir el llamado que ellos hacen y harán será insoslayable mantener en alto las banderas del antimperialismo que los dos abonaron como deber fundamental y con una entereza que autoriza a repetir una vez más esta conocida convicción de Martí: “La muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida”.
Sí Se Puede contribuye a recuperar la gestión pública del agua en Valladolid. ES necesario la remunicipalización de todos los servicios públicos de los Ayuntamientos de las ciudades y pueblos.
- Sí Se Puede contribuye a recuperar la gestión pública del agua en Valladolid
Cumplimos nuestras promesas. En julio de 2017, la gestión del agua volverá a ser municipal en el ayuntamiento de Valladolid, gracias al trabajo institucional de Sí Se Puede y de los socios de gobierno en la capital del Pisuerga: Valladolid Toma la Palabra y PSOE
La iniciativa se había fraguado en el seno de la Plataforma por la Gestión 100% Pública del Agua en valladolid, integrada por colectivos de la sociedad civil y, entre otras, por Sí Se Puede, y cuya exigencia primigenia ha consistido en que se adopten las medidas necesarias para la remunicipalización de la gestión del agua en la capital castellanoleonesa, mediante la creación de una empresa 100% pública.
Por fin, el pasado 30 de diciembre, el consistorio aprobó la remunicipalización, y su concejala de Medio Ambiente, María Sánchez, señalaba que “no sólo se garantiza la calidad del servicio y el suministro a tdos los ciudadanos”, sino que además “ya no habrá que abonar márgenes de beneficio de hasta el 82% en obras realizadas para el Ayuntamiento por parte de la concesionaria”. Desde 1996, la gestión del agua en Valladlid estaba en manos de una sociedad privada, y se calcula en 100 millones de euros los daños generados por falta de inversiones en la red de abastecimiento y alcantarillado de la ciudad.
«El agua es un recurso básico cuyo acceso constituye un derecho fundamental para cualquier ser humano, que no puede seguir siendo objeto de lucro para las empresas privadas, como venía siendo en Valladolid en los últimos 20 años», nos recuerda Charo Chávez, concejala de Sí Se Puede en el ayuntamiento vallisoletano. El esfuerzo institucional de los representantes del cambio, como Charo Chávez, en el municipio de Valladolid llevará a la ciudadanía de esta localidad a que su gestión vuelva a ser pública. Volvemos a poner las necesidades de la gente por encima de los intereses de las empresas privadas y sus lógicas especuladoras.
Si bien este logro no incidirá de manera notable en el precio del servicio, sí asegurará que la gestión del recurso hídrico sea más transparente y que no vuelvan a congelarse las inversiones, como lleva ocurriendo en las últimas dos décadas de gestión privada, de manera que la red pueda asegurar la salubridad, calidad y eficiencia del sistema. Esta medida permitirá que se inviertan 180 millones de euros en los próximos quince años, con el fin de renovar las infraestructuras y garantizar con ello la calidad del servicio.
Devolver la gestión de los servicios básicos a los municipios está en el eje de las políticas públicas que defienden Podemos y las demás fuerzas del cambio, y así se pone de manifiesto en la capital de Castilla y León.
De nuevo, damos testimonio de que sí se puede revertir la lógica de privatizaciones en nuestro país, poniendo a la gente en el centro de la vida institucional y convenciendo a otros partidos para articular mayorías que desde ya aprueben reformas útiles para la ciudadanía.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)