Algunos mineros heridos corrieron la cortina de sus habitaciones en el hospital para no verle la cara al ministro Soria
El poso del comportamiento
del Gobierno en los últimos dos años con el sector de la minería sigue
vivo en las cuencas. La tragedia del Pozo Emilio ha agudizado el
sentimiento de rechazo a todo lo que suene a Ejecutivo y, sobre todo, a
todo lo que suene a Industria como Ministerio. La firma del nuevo Plan
del Carbón no ha relajado esa situación, que en esta ocasión se ha
puesto de manifiesto.
El ministro de Industria, José Manuel Soria visitó este lunes a los
heridos en el Complejo Asistencia de León. Algunos de ellos no quisieron
recibir al representante del Gobierno.
“Me consta que alguno no quiso verle y pidieron cerrar la cortina. Hay que diferenciar lo que fue la negociación con lo que está pasando ahora, pero nos ha dado de lado, nos ha llamado privilegiados. Que se lo diga ahora a las viudas y a los huérfanos. El ministro es una persona non grata”, ha comentado el responsable de minería del sindicato Fitag-UGT y secretario del comité de empresa de la Hullera Vasco Leonesa, José Antonio Colinas.
Colinas aún guarda en su memoria la imagen de los compañeros fallecidos, instantes después del suceso. Los heridos se encuentran en el Complejo Asistencial de León y evolucionan favorablemente.
“Me consta que alguno no quiso verle y pidieron cerrar la cortina. Hay que diferenciar lo que fue la negociación con lo que está pasando ahora, pero nos ha dado de lado, nos ha llamado privilegiados. Que se lo diga ahora a las viudas y a los huérfanos. El ministro es una persona non grata”, ha comentado el responsable de minería del sindicato Fitag-UGT y secretario del comité de empresa de la Hullera Vasco Leonesa, José Antonio Colinas.
Colinas aún guarda en su memoria la imagen de los compañeros fallecidos, instantes después del suceso. Los heridos se encuentran en el Complejo Asistencial de León y evolucionan favorablemente.
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