Intervención de un miembro de ANEMOI en la Fiesta de L'Humanité en París. Militares españoles por la III República: Las Fuerzas Armadas con el pueblo. Manuel Ruiz Robles
Buenos días.
Soy
miembro del Colectivo de militares españoles ANEMOI. Mi graduación es
Capitán de Navío de la Marina Española en situación de retirado,
anteriormente fui miembro de la Unión Militar Democrática (UMD),
disuelta voluntariamente tras las primeras elecciones generales en
España el 15 de junio de 1977. Nuestro portavoz en el exilio en París
fue el Capitán de Aviación, piloto de reactores, José Ignacio Domínguez,
hoy Teniente Coronel de Aviación en la Reserva.
José Ignacio
fue condenado a siete años de prisión, con las accesorias de separación
del servicio y suspensión de todo cargo público, profesión, oficio y
derecho de sufragio durante este tiempo de condena. Lo fue en un indigno
Consejo de Guerra, el 27 de diciembre de 1977, bajo el reinado de Juan
Carlos I. Su delito: haber defendido las libertades democráticas y los
derechos sociales recogidos en la Constitución, hoy burlados
criminalmente bajo el ilegítimo reinado de Felipe VI. Reinado impuesto,
sin el menor respeto por la soberanía popular, en esta segunda
restauración borbónica española.
Anteriormente, otros valerosos
compañeros de la UMD habían sido brutalmente detenidos en sus
domicilios en plena madrugada -aún en vida del dictador, el asesino
Francisco Franco, promotor de la segunda restauración borbónica- jugados
en Consejo de Guerra, condenados a largos años de prisión y expulsados
del Ejército. Entre ellos el Comandante Luis Otero, fundador de la Unión
Militar Democrática, hoy Coronel retirado y Presidente del Foro Milicia
y Democracia.
La falsa Ley de Amnistía, en realidad una "ley
de punto final", ocultó los crímenes del franquismo y dejó expresamente
fuera de ella a los compañeros demócratas condenados y expulsados.
Aquella decisión "militar" es una prueba más del carácter ilegítimo del
régimen borbónico, que sigue ignorando a las víctimas del franquismo y
ha expulsado injustamente de la carrera judicial al Juez Garzón. Juez
que ha intentado valerosamente investigar las atrocidades de la
dictadura.
La presentación del Colectivo Anemoi en esta Fête de
l'Humanité del año 2014, cuya acogida fraternal agradecemos vivamente,
es para nosotros un hito más para dar a conocer nuestra lucha pacífica
por unas Fuerzas Armadas respetuosas con la soberanía popular.
Daré lectura de nuestro comunicado número 12, emitido el 25 de Agosto de
este año, que fue leído públicamente en los actos del 70 aniversario de
la liberación de Paris por el muy digno y heroico excombatiente
republicano Daniel Serrano, cuyo lema hacemos nuestro; "ne pas s'avouer
vencu" (no darse por vencido).
También daré lectura a algunos
párrafos de nuestro Manifiesto, presentado en un acto público en el Club
de Amigos de la UNESCO en Madrid el 23 de enero del presente año. En él
se pone de relieve nuestra inquebrantable actitud democrática al
servicio del pueblo y las motivaciones que nos impulsan a expresar
públicamente nuestros ideales. Por ultimo responderé a todas las
peticiones de aclaración que desee realizar el público asistente.
Procedo, pues, a dar lectura de nuestro comunicado número 12.
El Colectivo de militares españoles ANEMOI, fiel a la memoria de las mujeres y hombres que lucharon por la libertad, la democracia y la justicia social, rechaza el régimen borbónico del 78 -vigente en España e impuesto bajo extorsión militar- y propugna la unidad popular por un proceso constituyente en libertad.
En el 70 aniversario de la liberación de París nos honra enviar nuestro saludo fraternal al pueblo francés, a sus autoridades, y muy especialmente al pueblo de París junto a su alcaldesa Anne Hidalgo y su equipo de gobierno.
El 25 de agosto, 70 aniversario de la liberación de la capital, deseamos fervientemente que las autoridades francesas graben de forma indeleble en su callejero la memoria de los republicanos españoles que, junto a sus compañeros franceses, supieron morir para que Francia viviese. Sería sin duda un gesto decisivo del presidente Hollande que hermanaría una vez más a nuestros pueblos. Aquella lucha ejemplar contra la barbarie fascista es la que desde el fondo de nuestros corazones honramos todos los demócratas españoles.
¡No pasarán!
A continuación procedo a la lectura de algunos párrafos de nuestro Manifiesto: Las Fuerzas Armadas con el pueblo.
Un grupo de profesionales de las Fuerzas Armadas, preocupados por la deriva de la situación política y social en España en el contexto de la crisis global actual y estimulados por la creciente ola de protestas sociales, hemos decidido participar en el debate público. Queremos aportar nuestros conocimientos del medio militar para poner de relieve las amenazas y las limitaciones que el actual modelo de fuerzas armadas representan para los cambios necesarios.
...
En la actual situación de crisis, la soberanía popular está secuestrada por los grandes poderes económicos y financieros, nacionales y transnacionales. El pacto social establecido con la Constitución de 1978 ha perdido toda su validez. El estado de la Transición, lastrado en sus orígenes por la inclusión de los poderes económicos del franquismo, se ha convertido finalmente en un auténtico Régimen oligárquico en el que la “democracia” no es más que una declaración formal vacía de contenido.
...
La respuesta popular contra la crisis y, fundamentalmente, contra las terribles consecuencias de la misma, ha avanzado desde la perplejidad y el miedo, hasta la resistencia activa, pasando por las protestas masivas en la calle, la ocupación de las plazas públicas y el intento de bloquear y denunciar en sus propias sedes a los distintos poderes públicos.
La represión del estado de la Transición ha desarrollado métodos de control masivo de la población. Las detenciones arbitrarias, los cacheos y fichajes de los ciudadanos en manifestaciones y asambleas, y las amenazas a los dirigentes que alientan las movilizaciones, predicen la preparación de mecanismos de represión masivos si el movimiento popular sigue avanzando en organización, movilización y determinación en las protestas.
Las anunciadas reformas del Código Penal, de la Ley de Seguridad Ciudadana y de la Ley de Seguridad Privada, así como las que se avecinan sobre la Ley de Huelga y el Código Penal Militar, constituyen todo un repertorio de instrumentos represivos que vacían de contenido los derechos y libertades proclamados solemnemente en la Constitución, en lo que muchos analistas consideran un “golpe de estado” encubierto.
La clave de bóveda del Régimen de la Transición es la Monarquía y su conexión –constitucional y de fidelidad- con las Fuerzas Armadas. Su imagen de “salvadora” de la democracia tras el golpe del 23 F ha caído en el descrédito más absoluto.
Cada vez más las movilizaciones sociales levantan la bandera de la República. Cada vez más la exigencia de un “proceso constituyente” se plantea como el inicio de la solución a los problemas de este país, que no puede provenir de los responsables del desastre.
El Régimen resistirá apoyado en los recursos institucionales y represivos de su estado. La gran pregunta de las organizaciones sociales y políticas emergentes, de los sectores en lucha, de los que pretenden un mundo nuevo, es sobre cuál va a ser el papel de las Fuerzas Armadas y las Fuerzas de Seguridad ante los cambios que se avecinan.
En los últimos meses se han hecho públicas diversas manifestaciones de militares que plantean la fidelidad al Rey como Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, subrayando el papel que les ha reservado la Constitución como custodios de la misma y, sobre todo, manifestando la existencia de un “patriotismo militar” que está por encima de cualquier constitución y, por supuesto, de cualquier reclamo de soberanía popular.
Se plantea pues, en primer lugar, la necesidad de neutralizar la posibilidad de intervención militar cuando la revuelta popular resulte irresistible, cuando el choque social se agudice.
.......
La obediencia de las Fuerzas Armadas al Rey debe ser definitivamente quebrada. Únicamente es aceptable que la Jefatura de las Fuerzas Armadas recaiga en quien que haya sido democráticamente elegido. La III República es, pues, inaplazable.
He
finalizado mi intervención. Gracias por su atención. Será un placer
responder a las preguntas que los asistentes deseen formular.
París, 13 de septiembre de 2014
Manuel Ruiz Robles es Capitán de Navío de la Armada
Referencias:
Rebelión en los cuarteles : http://www.rebelion.org/apartado.php?id=454
Foro Milicia y Democracia : http://www.miliciaydemocracia.org/?p=2836
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