Los medios burgueses apenas informan sobre el ataque a las radios comunitarias en Asturias
Entrevista con Falo Marcos, miembro de Radio Kras (Gijón). Posible
sanción de entre 100.001 y 200.000 euros, además de un eventual cierre de la
radio
A pesar de que se les remiten comunicados y convocatorias, los medios de
información convencionales se hacen eco muy escasamente de la situación de Radio
Kras, emisora libre y comunitaria de Gijón con tres décadas de recorrido, sobre
la que pende una amenaza de multa (entre 100.001 y 200.000 euros) y cierre.
Denuncian una campaña de hostigamiento por parte de la Jefatura de Inspección de
Telecomunicaciones en Asturias (organismo que depende del Ministerio de
Industria), que también afecta a otras emisoras libres, como Radio QK de Oviedo.
Un problema de fondo es la falta de regulación del sector, a pesar de la
aprobación de la Ley de Comunicación Audiovisual hace cinco
años.
Educador social (casi siempre ha trabajado con colectivos en
situación de vulnerabilidad social) y miembro de Radio Kras, Falo Marcos empezó
a colaborar en la emisora en 1986, con el programa “Los lunes no madrugues”;
prosiguió con “El Pínfanu”, donde introdujo información alternativa y más tarde
se incorporó al magazine “A Contracorriente”, de contenidos culturales, sociales
y políticos. Desde hace más de una década realiza “Marabayu”, programa que
pretende dar voz a los movimientos sociales. En ocasiones presenta músicas,
grupos o discos relacionados con el mestizaje.
Entiende el trabajo de
comunicador como “una aportación a romper el silencio mediático que,
normalmente, sufren los movimientos sociales”. Esta labor la realiza en Radio
Kras, emisora que funciona de modo asambleario, se sostiene a partir de la
autogestión económica y abre los micrófonos tanto a las voces críticas con el
sistema como a la música alternativa a los circuitos
comerciales.
-Radio Kras es un grupo de comunicación alternativo
nacido en Gijón, en 1985. ¿Cómo nació la radio y de qué manera ha evolucionado,
a grandes rasgos, hasta hoy?
-La radio nace por iniciativa de un
grupo de ocho personas vinculadas a luchas sociales. En su Manifiesto
Fundacional decía que era “una radio abierta al pueblo de Xixón, a quienes
trabajan por construir el futuro, una radio que quiere contar con la
colaboración de quienes se oponen y resisten al actual estado de las cosas”.
Esto, unido a la difusión de músicas y grupos no comerciales, han sido las dos
patas principales sobre las que se ha sostenido la programación de Radio Kras,
además de vincularnos a otros colectivos sociales en la realización de jornadas,
actividades, campañas… Esta filosofía se ha mantenido a lo largo de estos 30
años.
Pienso que una de las mayores evoluciones que tuvimos fue a raíz de
la aparición de internet. Primero, porque nos permitió conocer de forma más
rápida situaciones que se vivían en otros lugares y ya, a partir de 2008, por la
emisión online y la difusión de podcast. Pasamos de ser una radio que sólo se
podía sintonizar en Xixón a que se pudiese escuchar en cualquier lugar del
mundo. También la incorporación a las redes sociales nos está permitiendo una
mayor difusión de contenidos que, por falta de recursos humanos, en ocasiones no
podemos realizar a través de la emisora.
Además, la utilización de la
telefonía móvil, nos permite realizar conexiones impensables en los años 80 y 90
como fueron las movilizaciones antiglobalización en Génova, el bombardeo sobre
Gaza o la llegada de la Marcha Minera a Madrid, por poner sólo algunos
ejemplos.
-El 7 de julio de 2015 la emisora recibió una
notificación de la Consejería de Economía y Empleo del Gobierno de Asturias, en
la que se advertía de la posibilidad de una sanción que podía oscilar entre
100.001 y 200.000 euros, además de un eventual cierre de la radio.
¿Responde
esta decisión a una maniobra política o es simplemente una sanción
administrativa de acuerdo con la ley?
-Hay que tener en cuenta
que la apertura de este expediente sancionador viene motivada por un acta de
inspección de la Jefatura Provincial de Inspección de las Telecomunicaciones en
Asturies, dependiente del Ministerio de Industria. El acta fue remitida a la
Consejería de Economía y Empleo, y de ahí se deriva el expediente. La
Consejería, en su pliego de cargos, hace una valoración estricta de la Ley de
Comunicación Audiovisual calificando los hechos como una infracción muy grave
por emitir en FM sin licencia, sin tener en cuenta que a una radio comunitaria,
actualmente, le resulta imposible acceder a una licencia.
Si hay maniobra
política o no lo podremos valorar cuando resuelvan las alegaciones que hemos
presentado al expediente, donde pedimos el archivo y sobreseimiento del
procedimiento sancionador, y el poder seguir emitiendo como servicio de
comunicación comunitario sin ánimo de lucro.
-La Ley de
Comunicación Audiovisual (2010) reconoce en el artículo 32 los “servicios de
comunicación audiovisual comunitaria”. ¿Se ha cumplido la ley? ¿Se ha regulado
el sector después de cinco años?
-La Ley no se ha cumplido, ya
que marcaba un plazo de 12 meses para que se desarrollara el reglamento con los
requisitos para ser considerado “servicio de comunicación audiovisual sin ánimo
de lucro”. Han pasado cinco años y no se ha publicado ese reglamento, con lo que
el Tercer Sector de la Comunicación sigue estando en un limbo legal que le
somete a la arbitrariedad de determinados organismos, como está pasando
actualmente con las radios libres y comunitarias
asturianas.
-Pedisteis al gobierno asturiano (la Consejería de
Economía y Empleo) el reconocimiento como “servicio de comunicación audiovisual
comunitaria”, de acuerdo con la legislación de 2010. ¿Cuál fue la respuesta de
la Administración?
-Basándonos en ese incumplimiento de la Ley y
en una Disposición Transitoria que decía que a aquellas emisoras existentes
antes de 2009 se les debería otorgar licencia, solicitamos en enero de 2012 la
concesión de título habilitante. La primera respuesta fue pedirnos documentación
que demostrase que existíamos antes de 2009, cosa que hicimos en junio de 2012 y
desde entonces no recibimos ninguna respuesta más.
-Las radios
libres y comunitarias denuncian una campaña de hostigamiento por parte de la
Jefatura de Inspección de Telecomunicaciones en Asturias (organismo que depende
del Ministerio de Industria). ¿En qué consiste la persecución denunciada y a qué
emisoras ha afectado? ¿Se han llegado a cerrar radios?
-Esta
situación empieza a cambiar cuando se jubila el anterior responsable de la
Jefatura y llega el actual, José Antonio Díez Menéndez, hace unos cuatro años.
Su primera actuación contra las radios comunitarias fue enviar cartas a las
comunidades de vecinos donde estaban instaladas las emisoras para que
identificaran a los propietarios de las mismas, bajo amenaza de multas de hasta
500.000 € si no colaboraban.
Esto provocó que Radio Sele de Uviéu
(emisora íntegramente en asturiano) dejara de emitir por la FM en octubre de
2011. En 2014 se inició un expediente contra Radio Nava a través de la
Secretaría de Estado de Telecomunicaciones (SETSI) del Ministerio de Industria,
lo que también provocó el cierre y desaparición de la emisora tras ser
sancionada con dos multas por valor de 30.000 €. A principios de 2015 hizo lo
mismo con Radio Ujo (Mieres) que ha dejado de emitir en FM y está a la espera
de que se resuelva el expediente en la SETSI.
En el caso de Radio Kras y
de Radio QK (Uviéu) las denuncias de la Jefatura Provincial han sido enviadas a
la Consejería de Economía y Empleo y, es por ello, que ambos expedientes se
estén tramitando desde el Gobierno asturiano. Si dichos expedientes prosperan
estaríamos hablando, prácticamente, de la desaparición de las radios libres y
comunitarias asturianas en la FM.
-¿Es diferente la situación en
Asturias a la de otras autonomías? Si es así, ¿cuál crees que es la
razón?
-Totalmente. Las más de 200 emisoras comunitarias
existentes en nuestro país están en la misma situación legal y, sin embargo,
siguen emitiendo sin problema. Solamente conocimos, recientemente, el caso de
San Borondón de Canarias que ha sido multada por el Gobierno canario con 100.001
€ y que están en proceso judicial.
La razón principal es la actitud del
Jefe Provincial de Inspección de las Telecomunicaciones, que ya manifestó en su
momento que iba a “limpiar el dial”, sin tener en cuenta la realidad social ni
la situación de inseguridad jurídica. A esto hay que añadir que desde el
Gobierno asturiano no se ha promovido ninguna actuación que permitiera avanzar
en la regularización, ni se ha presionado a la Administración central para que
desarrollara lo establecido en la Ley de Comunicación
Audiovisual
-A principios de los años 80 florecieron las emisoras
libres y comunitarias en Asturias. ¿Cómo recuerdas esta eclosión? ¿Se mantiene
la pujanza hoy en día?
-Fueron, por un lado, momentos difíciles
por que también, en aquella época, había amenazas de sanciones y cierres hasta
que se fue estabilizando y permitiendo que viviésemos en una situación de
“alegalidad”, pero había mucha ilusión por participar en un medio de
comunicación alternativo.
Por otro lado, hubo muchas emisoras que aparecían y
desaparecían vinculadas a barrios o asociaciones ya que era complicado mantener
una programación, un local, equipos técnicos,…
Hasta que empezó este
ataque podíamos decir que los proyectos de comunicación comunitaria existentes
en Asturies (Radio QK, Radio Kras, Radio Sele, Radio Nava, Radio Ujo,…) estaban
consolidados ya que tenían una trayectoria de muchos
años.
-Vistas las persecuciones a las radios libres en Asturias,
¿tiene el PSOE algún crédito cuando critica la "ley mordaza" o la reforma del
Código Penal o la manipulación de las televisiones públicas (autonómicas) en
manos del PP? ¿Es igualmente grave lo que ocurre con las radios libres, aunque
posiblemente sea poco conocido el hostigamiento fuera de
Asturias?
-Parece una costumbre habitual defender unas cosas
cuando se está en la oposición y otras diferentes cuando se gobierna.En el caso
del PSOE en Asturies también ha sido muy criticado por su manera de gestionar la
televisión pública asturiana.
Si se consuma la sanción y cierre de las
radios libres asturianas estaríamos hablando de uno de los más graves atentados
a la libertad de expresión y de comunicación en nuestra comunidad
autónoma.
Confiamos en que nuestra exigencia de archivo y sobreseimiento
del expediente se lleve a cabo y que, después, sirva para avanzar en el
desarrollo legislativo que permita la regularización de las radios libres y
comunitarias.
En el marco político actual, Asturies puede pasar a la
historia de los medios del Tercer Sector de la Comunicación como la comunidad
autónoma que acabó con ellos o como la que abrió la puerta a su reconocimiento
legal y apostó verdaderamente por el Derecho a la Comunicación. La postura que
adopte el PSOE puede ser determinante en ello.
-La Dirección
General de Economía e Innovación del Gobierno de Asturias afirma que Radio Kras
emite en FM sin licencia, de lo que deriva la posibilidad de multa y amenaza de
cierre. ¿Hay ejemplos de emisoras en las mismas circunstancias a las que se
aplique un trato diferente?
-Estos días hemos conocido a través
de un artículo de Patricia Simón en Periodismo Humano que emisoras comerciales
como EsRadio (la radio de Jiménez Losantos) y Viva Fm están emitiendo sin
licencia, sin que sepamos que tengan ningún expediente abierto.
En este
caso hay que hacer la salvedad de que las emisoras comerciales sí tienen
regulada su actividad y tienen la posibilidad de presentarse a concursos para
conseguir su licencia.
Se trata de empresas con ánimo de lucro que
realizan una actividad ilegal y que en el caso de EsRadio recibió, el pasado
año, una ayuda de 22.000 €, reconocidos por el Ayuntamiento de Xixón, para la
realización de un programa en directo desde nuestra ciudad.
-Por
último, ¿qué apoyos habéis recibido? ¿Ha llegado a la “gente común” –no
militante- la amenaza que pende sobre Radio Kras?
-Hasta el
momento hemos recibido apoyo de unos 50 colectivos y entidades asturianas que
van desde asociaciones culturales, sindicales, Coordinadora de ONG´s,
plataformas como Asturies en Pie, Marches de la Dignidá 22M, el Conseyu de la
Mocedá de Asturies, partidos politicos como Equo, Podemos o Izquierda Unida,
centros sociales,…, entre otros.
Además, en el ámbito estatal, tenemos
apoyo de la Red de Medios Comunitarios (ReMC), el Foro Andaluz de Comunicación y
otros medios comunitarios.
Hay que tener en cuenta que la campaña la
hemos iniciado hace apenas 15 días y que los medios convencionales (a los que
accede la “gente común”) apenas están dando espacio a nuestra situación a pesar
del envío de comunicados y convocatorias. Parece que el hecho de que pueda ser
cerrado un medio de comunicación por un gobierno no es un tema que interese a
los medios tradicionales.
Radio Kras
No hay comentarios:
Publicar un comentario